El congreso, fueron porque la facultad se los patrocinó. En la tarima del salón una expositora mostraba a los espectadores una investigación psicoanalítica. Lyla y sus amigas fueron hacia la mesa de bebidas y aperitivos; tomaron galletas y coca-cola.
Luego sucedió algo inesperado, la joven comenzó a oler un exquisito aroma que invadió sus sentidos, haciendo que perdiera el control de su humanidad. Comenzó a gruñir, sus ojos cafés se hicieron azules y, sus amigas Airi y Azul se alarmaron; no podían dejarla qué hiciera lo que estaba a punto de ejecutar. Por otro lado Fanny, una compañera de clase, se acercó.
—¿Qué pasa L? ¿Dónde está? —Antes que Lyla pudiera contestar, Azul la atrapó por detrás; ella pataleó y peleó para ir hacia la mujer que se había cortado la mano con un pedazo de cristal roto. Al parecer se le había tirado su vino. El olor de su sangre, provocaba que se le hiciera agua la boca. Debía probarla, tenía que hacerlo, era deliciosa.
—Déjala Fanny—, rezongó Airi, ya que su compañera comenzó a bombardear a Lyla con preguntas. Y lo que menos querían era llamar la atención en ese congreso lleno de mucha gente.
—Lyla—, habló Azul haciendo mucho esfuerzo para detenerla y que no se zafará de su agarre. —Contrólate, tú no eres así. Tienes que tranquilizarte...Recuerda...
—Lyla—le ayudó Airi. —Sí haces un desastre van acabar contigo. No les hacía caso, gritaba y gruñía tratando de zafarse de los brazos de Azul, tenía sed...y era horrible.
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Crónicas de un soñador II ©
ContoLos sueños de Lyla siguen y con ellos las aventuras que provocan confusión en la realidad, porqué a veces después de despertar se mezclan sus mundos. Crónicas de un soñador II ©2015. Todos los derechos reservados. Esta obra está registrada en safe...