No podemos casarnos !

𝚇𝚅𝙸𝙸

–!!!SOY UN HOMBRE MALDITA SEA!!!– dijo su querida "Wanda" o como se llama el acaso

Hannibal quedó impactado un breve momento conectando cabos rápidamente, el joven era de cabello castaño rizado y su característico color de ojos verdes, recordó al chico que miro cuando planeaba la futura boda de él y Wanda junto a Belinda, era el chico de ceño fruncido al fondo del bar.

–Bueno, nadie es perfecto querido – dijo con una sonrisa –Además eso lo hace aún mejor–

Hannibal sonrió ampliamente tomando la mano del joven y besándole el dorso, el mayor estaba asombrado del como este joven había engañado a alguien como el, debía admitirlo que antiguos pensadores tenían razón al decir "el amor te vuelve ciego"

Will sorprendido apartó su mano del hombre mayor –Siquiera oíste lo que dije? ¡Soy un hombre! ¡Todo este tiempo lo fui! ¿Acaso no te da...asco? –

Hannibal ríe un poco –En la antigua Grecia se creía que el vínculo entre dos hombres era el pináculo del amor verdadero–

Will se quedó perplejo –Yo... ¿Entonces no estás enojado? Tu amabas a Wanda...–

–Amo a "Wanda" por lo que eres tú, aunque si me resulta algo vergonzoso no haberme dado cuenta antes, y más ahora que debo preguntar tu nombre verdadero–

Will ligeramente sonrojado dijo –Soy Will Graham–

Hannibal sonrió y acaricio el cabello rizado de Will –Hermoso nombre, Will–

El joven y el mayor pasaron adentro del yate, donde Will pido un cambio de ropa a Hannibal quien gustosos de lo dio, aunque había poca ropa que quedara a ala complexión de Will.

El mayor guardo el libro donde había dibujado el rostro de "Wanda" y saco un libro nuevo, donde empiezo escribió el nombre de Will, el menor salió del baño, ya sin el maquillaje y con ropa de Hannibal la cual era una camisa blanca y un pantalón negro.

–¿Y no preguntarás ¿por qué hice todo esto? – pregunta el pianista, recargando se contra la pared contrario a Hannibal.

–No Will, si tú tienes la confianza de decirme el motivo lo escucharé, si no, no te obligaré– empezó a dibujar el mayor mirando ocasionalmente a Will, aunque no lo necesitará mucho gracias a su buena memoria.

–Eres lindo, para ser un viejo con hepatitis – sonrió el pianista

–Y tú eres más hermoso sin estar enojado todo el tiempo – Hannibal, miro al joven quien rápidamente frunció su ceño –No olvídalo, eres aún más hermoso enojado–

Ambos hombres rieron y pasaron su noche tranquila, conversando casualmente mientras Hannibal dibujaba y Will hablaba, claro el joven pianista no reveló el hecho del porque se había disfrazado de mujer.

°°°

aunque en tierra, la noche era de todo menos tranquila, el doctor Donald logro estabilizar a Matthew quien adolorido despertó –Wanda... ¿dónde está? – trato de sentarse, pero todo su cuerpo dolía.

Beverly fue a visitar a Matthew junto a Freddie pues Will le dejo una nota, para que fuera a ver si lograba obtener algo.

–Hola Matthew soy amiga de Wanda, me pido visitarte– dijo la saxofonista e hizo una seña discreta a Freddie

–Oh doctor ¿sabe? Siempre me eh preguntado cómo funciona la enfermería...– dijo la pelirroja distrayendo a Donald y llevándolo algo lejos para que Beverly pudiera sacar información.

En cuanto el doctor se fue Matthew le dijo a Beverly en voz baja –Debes llevarte a Wanda de florida... Hannibal no es un buen tipo Beverly, yo pensé que solo eran rumores, pero creo que es cierto...– dijo nervioso el mesero