𝚅𝙸𝙸𝙸

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Mientras tanto Will entretenía a Hannibal,la saxofonista entro al barco de esté, el barco por dentro estaba lleno de cajas negras y como había dicho por teléfono, otras cajas color carmín que traían etiquetas de diferentes lugares del mundo.

Beverly logró abrir una caja si bien era cierto estás tenían vestidos hermosos e incluso jotas típicas de la región que dijera la caja, Beverly solo suspiro decepcionada su corazonada estaba equivocada.

–Talvez Will tenga razón...me estoy volviendo loca.– dijo para sí misma la saxofonista salió con cautela del barco de Hannibal, pero camino a su camarote pues ya era algo noche, pensó quien como le habrá ido a su amigo con Hannibal cuando, miro a los mismos hombres del taller de autos.

–Carajo...–La mujer se escondió rápidamente detrás de una bisagra, pero empujó a alguien que ya estaba ahí escondida.

–Oye búscate tu propio lugar para espiar– dijo una mujer de cabellos rojos ondulados agachándose para tratar de ver a los mafiosos mientras anotaba en una libreta.

–Sabes quiénes son?– Beverly se agachó para poder hablar con esta mujer.

La pelirroja bufó molesta de que la interrumpieran –Es la Mafia Chesapeake, conocidos por el contrabando de alcohol y armas– la chica alzo su mirada solo para ver qué dichos hombres ya se habían ido a algún lado. –Genial! gracias ahora no sé dónde estarán–

Antes que la pelirroja se fuera, Beverly la alcanzó –Espera! ¿Ellos tienen de casualidad algo que ver con este símbolo de está flor? –

La pelirroja miro la foto pensando un momento –No, pero, recuerdo vagamente este símbolo de algún lado...– extiende la mano hacia Beverly –Soy Freddy Lounds futura periodista–

Beverly sonrió y estrecho la mano de Freddy –Beverly Katz futura policía– ambas sonrieron.

–Entonces será un gusto tenerte de compañera–

Ambas se fueron por caminos diferentes pues ya era casi de madrugada, cuando Beverly entro al cuarto ya Will estaba ahí.

No podemos casarnos !Donde viven las historias. Descúbrelo ahora