Rechazada

CAPITULO 1

Me levante temprano, a las 6 de la mañana, me siento muy ansiosa por el simple hecho de que mañana es mi transformación. Estoy muy emocionada. La transformación ocurre a los 16 años. De a saltitos llego al baño, hago mis necesidades mientras tarareo y bailo. Por fin conoceré a mi loba. En mi familia es muy importante, ya que mi mamá es la beta de la manada y mi papá el jefe de la seguridad. Mi hermano, Matt, que ya recibió a su lobo hace tres años es el beta del futuro alfa Franco. El punto es que hay mucha presión o así me siento, ademas de que estoy muy emocionada.

Me miro al espejo, no estoy tan mal, digo, se supone que mi cuerpo ya debería de desarrollarse, pero parece que sigo siendo una niña.

Vamos Jara todo a su tiempo.

Bajo a prepararme el desayuno, hay que bajar un poco esta emoción acompañada de ansiedad, la preparatoria empieza a las 8 así que tengo tiempo. Me preparo leche con cereal y me dispongo a comerlo.

¿De qué color será mi loba? ¿qué rango tendré?

-¿Nerviosa?- alzo la vista hacia la voz de mi hermano.

-Un poco nano, bueno no mucho, solo que...

-Jajajaja tranquila enana respira, estaré contigo, en las malas y en las peores, recuerdas. - dice Matt es algo que decimos desde los 7 años bueno los míos. Él es tres años mayor que yo, ahora tiene 18.

Deja un beso en mi cabeza y se dispone a prepararse su desayuno.

- ¿Duele?

-Un poco, es algo que se vuelve soportable con el tiempo.

-Pero es un dolor...

-Enana vas a estar bien, estaremos contigo, mamá y papá- trata de tranquilizarme, pero me siento más ansiosa- somos los cuatros contra el mundo, tú lo has dicho.

Cierto, lo dije hace años atrás, como recuerda cada cosa que digo, yo apenas recuerdo lo que he hecho hace un momento. Me dispongo a terminar mi desayuno.

Subo a mi habitación y preparo las cosas para el instituto. Al bajar me encuentro con mi padre.

-Buen día papá

- ¿Cómo este cariño? ¿No es muy temprano? Todavía falta- dice mientras mira su reloj.

-Ansiosa, papá, escucha me voy a pie así me relajo un poco.

Antes que pueda responder salgo de mi casa. Suspiro aliviada. Me dispongo a retomar el camino, mientras intento calmar mis nervios. Se supone que ya debería de haber escuchado una voz en mi cabeza. O eso es lo que dice mi mamá, cuando se transformó por primera vez, comenzó escuchando una voz y era su loba.

Hola, hola hooolaaaa lobita.

Silencio, solo, el eco de mi conciencia. Creo que me siento un poco presionada. En fin, seguro llega a más tardar al mediodía esa dicha vocesita. Nací una noche de luna llena, mi papá dice que fue a las 00AM justo cuando la luna estaba en su punto, en un martes 13 de octubre, el mes de las brujas. Me rasco la cabeza y dejó un lado tanto pensamientos ansiosos y nerviosos. Solo que no quiero decepcionar mi mamá.

-Jaraaaaaaaa mi hermosa Jaraaaa- siento los bazos alrededor de mis hombros de mi mejor amiga, Julieta. -Feliz pre-cumpleaños, pre-cumpleaños a tiii.

Canta a todo pulmón mientras me da besos por toda la cara.

-Aun no es mi cumpleaños, hoy es 12- me rió mientras la aparto de mi cara.

-Lo sé, lo sé, solo quedan horas y serás una lobita muy tierna- me jala de los cachetes, le aparto las manos, mientras entramos a la prepa.- sabes solo dentro de una semana te alcanzare y seremos dos lobas hermosas, y además de eso encontraremos a nuestro mates, imagina a nuestros guapos compañeros.