CAPÍTULO 11

353 48 2
                                    

PASADO

POV ENID

-¿Alguna vez imaginaste esto? ¿Tal
y cómo estamos ahora? -Preguntó
Wednesday, quién estaba recostada a lado de mí, en el césped de su jardín. Mi cabeza se escondía discretamente entre su cuello y su hombro, sólo me deleitaba con el aroma que emanaba de su cuello, Una de sus manos me envolvía y la otra me hacía mimos por mi espalda.

-Abrazadas... ¿Acostadas sobre
el húmedo césped esperando las
estrellas? ¿Así? -Bromeé un poco
y enseguida la tierna cara de Wednesday sonriendo se hizo presente, lo cual me encantaba.

-Ens... sabes a lo que me refiero.

-¿A ti? La reina Wednesday Addams y yo la plebeya Enid Sinclair ¿Juntas?

-No digas eso Endy...

-No, la verdad es que nunca...
-Sonrió y dejó un delicado beso en
mi frente. -Bueno... ahora que lo
pienso, sí. Una vez.

-¿Ah sí? ¿Cuándo?

-El verano pasado cuando me
invitaste aquí mismo a tu jardín
a pasar un rato en la piscina.
-Comencé a rozar mi nariz y mis
labios por su cuello. No podía
evitarlo, provocarla me encantaba.
-Diablos Weds... hay chicas que
simplemente deberían tener
prohibido colocarse un traje de dos
piezas.

-Ens... por favor. -De un sólo
movimiento me separó de su cuello
y quedó arriba de mí. -Entonces...
¿Sólo después de mi insignificante
exhibición en la piscina nos
imaginaste? -¿¡INSIGNIFICANTE!?
dije en mis adentros, mientras
pensaba en alguna otra probable
vez.

-Mmmm... sip, sólo esa. Como ya dije... Tú eras la más popular en el
colegio y yo a tu lado no era nadie.
Era casi imposible...

-¡CASI! Casi... -Se acercó de a
poco, mirando mis labios, hasta
que decidió dejar de torturarme
y unirlos con los míos. Entraba
en una enorme especie de frenesí
cuando la besaba. Era estúpido
siquiera pensar en apartarla. Sus
labios tenían un sabor único y un
perfecto encaje con los míos. -Y
además... qué vergüenza.

-¿Vergüenza de qué? -Pregunté
exaltada por su comentario.

-Qué vergüenza porque yo nos
imaginaba juntas todos los días.
Todooooos. -Sonreí por inercia.
Justo cuando creía que no podía
ser más tierna conmigo sacaba algo
para sorprenderme.

-Quien lo diría Addams... pero ahora lo sé. Ahora sé que no hay otro lugar donde me gustaría estar.

-Abrazadas... ¿Acostadas sobre
el húmedo césped esperando las
estrellas? -Preguntó de forma
irónica, en efecto burlándose de un
poco de lo que había dicho.

-Entre tus brazos, Weds.

PRESENTE

Abrí lentamente los ojos después
de ese pequeño sueño, ese pequeño
recuerdo, encontrándome con
la ventanilla del avión. Por un
momento quise arrojarme de este
y regresar. No sé en qué momento
Yoko me convenció de viajar,
pero lo hizo. Ahora estaba aquí en
camino a la ciudad que tanto me
maravilló de niña, ahora era el
último lugar en él quería estar.

Por más que me resista algo de lo
que me dijo Yoko es cierto, no sé
qué podría encontrar en Nueva
York y nunca lo sabré si no lo
enfrento como se debe. No será
fácil. Los últimos días de mi vida
desde aquella llamada han sido un
infierno. Pero algo... una pequeña
parte de mi ser me impulsaba a
creer que no todo estaba perdido.
Un pequeño fragmento de mi alma
seguía encendido y me decía que
ella aún no se ha ido.

A PRUEBA: A LA SOMBRA DE LAS TORRESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora