POV ENID
"Carta número 1062:
Tuve una gran discusión con
Divina esta tarde. Hablamos de ti y
discutimos por ti. Tu ausencia me
mata un poco. ¿Sabes? Un día siento que podría hacer cualquier cosa y al otro tengo ganas de irme contigo. Haz que pare Weds... haz que todo esto se acabe por favor."Enviado
Nunca había estado tan enojada
antes. ¿Cómo había sido capaz de
decir eso?Tomé mi chaqueta y salí con
la sangre hirviendo del enojo.
Caminé despejando mi mente de
todo, hasta que llegué al parque
donde Weds y yo solíamos hacer
picnics los viernes saliendo del
colegio. Me recosté debajo del árbol
donde siempre nos sentábamos,
conecté los audífonos a mi celular
y puse un par de canciones que
me recordaban a ella. Cualquiera
podría pensar que lo hice por
masoquismo, pero de hecho ni yo lo
sé, tal vez por la misma razón por la que seguía escribiéndole a diario,
la sentía cerca y eso me calmaba
porque era lo que necesitaba. No
supe en qué momento me quedé
dormida y cuando por fin desperté,
estaba más oscuro que antes, miré
la hora en mi celular.-10:27, mierda. -Me levanté del
lugar, le di una última mirada y
me dirigí de regreso a casa. No
tenía muchas ganas de regresar y
posiblemente toparme con Divina,
pero en algún momento tendría que hacerlo y, de todos modos, no podía huir de todo, todo el tiempo. Entre más pronto mejor.-
-
Una semana pasó de aquella
discusión. No duramos demasiado
enojadas. Cuando llegué a casa, ella estaba esperándome en el
living, nos sentamos a hablarlo
y todo se arregló, creo. Todo iba
mejor, definitivamente. Yoko se iba
a Nueva York esta noche, así que
fui a su casa para ayudarle con su
equipaje.-¿Estás segura de que no quieres
venir?-Aunque dijera que sí, no vas a
comprar un boleto de última hora
para el mismo vuelo que tú.-Quien sabe... tengo mis contactos.
¡Oh no! Eso no... pásame el abrigo
negro.-Gracias por preocuparte por mi,
te lo he dicho una y mil veces,
no gracias Yoko, no quiero ir. No
volveré.-Sigo pensando que sería lo mejor para ti...
-Síguelo pensando, no lo haré.
-Ojalá Roger se case en Nueva York,
así no tendrás opción.-Yo sólo estoy orando para que
algún día Roger se case. -Yoko rio
un poco.-Ok, en ese punto tienes razón.
¿Qué harás esta semana?-Lo de siempre... trabajar. Quizá
podamos ir a comer el sábado que
vuelvas ¿Sí?-Ok, me parece. Yo paso por ti ¿Está
bien? Como a eso de las 3.-Perfecto, entonces nos veremnos
pronto. Cuídate mucho, por
favor. Cualquier cosa, por muy
insignificante que parezca, vuelve.-Hey tranquila... todo estará bien
¿De acuerdo? -Si claro, "todo estará
bien", mismas palabras citadas por
Wednesday un día antes de irse y mira lo que pasó. Nada está seguro en la vida, desde aquel día, odio que me juren cosas, que me digan que todo estará bien cuando claramente no.lo saben.-No digas nada, sólo cúmplelo.
-
-
Un par de días me levanté un poco
más tarde de lo usual. La estructura
de las paredes de mi oficina se dañó
a causa de las lluvias, así que hoy
irán a repararlo y yo aprovecharé
este día para descansar.-Enid... cariño, me voy, nos vemos
en la tarde.-Claro, que tengas un excelente día.
Divina se fue y me dejó la casa para
mí sola. Mas tarde, cuando vuelva
iríamos a su casa a pasar el resto
de la semana ahí, así que debía
empacar un poco de cosas que
llevar. Después de desayunar, me
distraje un poco, hasta que recordé
que no había revisado el correo
esta semana. -Mierda... ¿Dónde
habré dejado las llaves? -Divina había sido la última en abrir el buzón y las llaves no estaban en donde se suponía que debían estar. -¿Dónde rayos?- Busqué por la cocina, el living, mi escritorio, la habitación, volví al llavero y saqué todo por décima vez, pero todo era inútil... no estaban. Entonces decidí buscar en los bolsillos de los abrigos que estaban colgado detrás de la puerta, tres eran míos y uno de Divina. -10 dólares... increíble. -Creo que siempre, tengas la edad que tengas, una de las mejores sensaciones siempre será encontrar dinero en tu bolsillo, sea cuando sea. Entre los 10 dólares, un caramelo, algunos tickets de gasolina y algunas basuras, encontré las llaves en el abrigo gris de Divina, junto con otro objeto, algo así como una caja pequeña aterciopelada, la abrí... quedé paralizada, sentí como la sangre de mi cabeza bajó hasta mis tobillos, podría jugar que estaba más pálida que un fantasma. Tomé el primer abrigo que tuve enfrente y salí de la casa. Necesitaba hablar con la única persona que podía ayudarme en esto. -No por favor... esto no puede estar pasando.POV YOKO
Era inevitable estar aquí y no sentir nostalgia o algo, pero no había duda de que Nueva York era increíble. Las calles, los edificios, Central Park, todo era maravilloso. Sebastian y yo nos sentamos a
comer en una pequeña cafetería y
mientras comíamos no pude dejar
de pensar en la odiosa de Wednesday...-¿En qué piensas amor?
-Más bien en quién... -Dije a secas.
-¿Me equivoqué al traerte conmigo?
Si quieres podríamos regresar...
sabes y...-No, para nada, todo está bien. Me
gusta acompañarte, pero... sólo
que ella y yo chocábamos mucho,
para mí siempre fue una odiosa-
Sonreí recordándola.- Pero la quise
¿Sabes? Y mucho. Era una persona
increíble.-Lo sé, ella también me agradaba
mucho y es frustrante pensar en
el momento en que murió... como
habrán estado las condiciones... que
habrá sido lo último qu... -¿Pero
qué...?-Sebas... Sebas mira. -Volteé su
rostro hacia atrás y apunté hacia
una chica de espaldas que iba
hablando por teléfono. Era alta y
tenía el cabello largo y negro. Igual
que...-¿Wednesday...? -Ambos nos miramos con una cara en completo estado de shock.
-Sigámosla ¡Sigámosla ahora!
-Yoko no he pagado esto.
-¡Entonces paga y date prisa! ¡Iré
tras ella!-¡Yoko... Yoko, mierda espera!
Hice caso omiso a sus llamados
y comencé a correr tras aquella
chica. ¿Y si era ella? ¿Qué carajos le
pasaba? ¿Por qué no había vuelto?
La multitud caminando en sentido
opuesto al mío me dificultaba
alcanzarla, no sé a cuantas personas empujé, tenía un sólo objetivo en el cual concentrarme. Diablos ¿Qué pensará Enid si es ella?-¡WEDNESDAY!... ¡WEDNESDAY! -Nada, iba tan concentrada en su llamada y más el ruido de las calles, era imposible que me escuchara. Seguí corriendo, esquivando a cualquiera que se me cruzara, hasta que por fin estuve lo suficientemente cerca de ella.
-¡WEDNESDAY POR LA MIERDA!
-La tomé del brazo e hice que me
mirara.-¡OYE! ¿QUÉ TE PASA? ¿Cuál es tu
maldito problema?-Oh... dios mío.
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A PRUEBA: A LA SOMBRA DE LAS TORRES
FanficNunca podemos saber que va a pasar el día de mañana, y ya sea por un mal momento, ya sea sentimental, económico o amoroso, ya sea tan sólo un par de valiosos minutos en los que te demoraste en salir de un edificio, puede ser lo que sea... y tu vida...