¿Amor o amistad? esa es la cuestión 《Changlix & HyunIn》

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¿Changbin alguna vez se enteraría? esperaba que no.

Incluso cuando la película había acabado, Changbin continuaba descansando sobre él, Felix no se oponía a aquello. Estuvieron así unos minutos más, hasta que un fuerte suspiro inundó el ambiente y Changbin despertó.

Tembló al ver a Changbin restregando su rostro aún semi ensoñado, asustado ante la clara necesidad de sacudir su cabello como si de un perrito se tratase.

-¿Ya terminó la película?, ¿hace cuánto me dormí?- preguntó el somnoliento, mirándolo confundido desde su distancia e incorporándose lentamente, al parecer poco consciente de donde había estado descansando.

-Oh, terminó hace un rato-respondió alarmado, inquieto, alejándose por inercia de la cercanía que tenía con el contrario, como si hubiese hecho algo malo.

-¿En serio? Uff, me aburrió demasiado.

-Dímelo a mí, que tuve que verla completa- procedió a reir nervioso, intentando recomponerse.

El más bajo carcajeó restregando sus manos por todo su rostro y desordenando su cabello, soltando bostezos pequeños y calmados.

Felix lo observó con detalle ante tal acción, y lo encontró de más interesante. Una sensación extraña surgió en su interior poniéndolo en alerta.

De repente cayó en cuenta que ya era tarde, prácticamente de noche, y que tenía que volver a su casa. Era una perfecta excusa también, no aguantaba un minuto más ahí, tenía que salir o terminaría desmayándose, no sabía por qué, pero así sería.

-Cierto, ya tengo que irme, es tarde-habló rápido.

-Oh, en serio...

La cara de Changbin cambió de una total felicidad a una de total decepción. Y fue tan obvio que Felix no fue capaz de pensar en algo diferente al que era porque ya se iba. Aquel pensamiento lo hizo sentir en parte satisfecho. No pudo más que volver a sentirse agitado de nuevo, otra vez culpable por sentir aquello.

-Bien, entonces, voy contigo.

-Oh, no es necesario.

-Pero...

-De verdad, estoy bien. Conozco el camino.

Sin escuchar más tomó su teléfono y salió, sin esperar ser acompañado.

Una vez afuera es que pudo soltar todo el aire que llevaba conteniendo por dentro. Su piernas un poco debilitadas debido a su rápido caminar, su rostro bastante caliente.

Felix se recriminó así mismo.

¿Qué rayos le pasaba?
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Al día siguiente Hyunjin estaba parado en la puerta de su casa a la hora indicada.

Jeongin sonrió complacido, pues a diferencia del Hyunjin del día anterior, este parecía más relajado, con ropa casual que se notaba bastante cómoda, usando lentes de descanso y haciendo muecas un tanto graciosas. Era un estilo con el que Jeongin podía identificarse. Pero aún así, no dejaba de verse igual de guapo.

-Ya estoy aquí, temprano como pediste. ¿Feliz?

-Mucho.

Jeongin lo dejó pasar con una gran sonrisa dibujada en su lindo rostro.

-Entonces...¿Estudiaremos aquí?

-Sí, pensé que si íbamos a la biblioteca tal vez haríamos mucho ruido. Además, no quiero que te distraigas fácilmente.

-Me llamaste distraído, auch.

Jeongin carcajeó mientras lo observaba quitarse lo zapatos.

-Lo de bueno es que nadie nos molestará, a estas horas mi casa está vacía, mis padres trabajan y mi hermano pequeño tiene academia por la tarde. Así que esta bien, no será incómodo para ti.