28

39 11 0
                                    

Despertó en medio del desorden de sus sábanas, solo.

Felix ya no estaba, no supo en qué momento pudo haberse ido.

Suspiró con cansancio.

Lo único que recordaba era que se había besado durante toda la noche con uno de sus mejores amigos, con mucha intensidad, durante mucho rato. Probablemente ese había sido uno de los mejores besos jamás tenidos. Bueno, en realidad ese había sido su primer beso, pero aún así, el mejor hasta ahora.

Dios, no podía creer el haber besado a un hombre, a su amigo.

Se sintió avergonzado en medio de su soledad, y culpable, hasta hace unos días había rechazado los sentimientos de Felix y ahora...¿tan solo lo besaba? No tenía sentido, debía disculparse.

De inmediato tomó su celular y marcó el número de quien invadía por completo sus pensamientos en los último días.

Como esperaba, no contestó, ni a la primera, ni a la segunda, ni a la tercera.

Por un momento pensó en ir tan pronto a la casa de Felix y disculparse.

Pero además de eso, ¿qué otra explicación podría darle para lo de anoche? Ni el mismo podía entenderlo. Era algo que había sucedido sin previo aviso, sin haberlo imaginado si quiera.

No supo en qué momento cedió ante ello.

Marcó una vez más al número de Felix, pero de nuevo la llamada no fue atendida.

De todos modos, ¿cómo aclararía las cosas con Felix si ni él las tenía claras?

No quería seguir siendo egoísta, tratar de remediar las cosas solo provocaría seguir lastimando los sentimientos de ambos.

Entonces dejó de insistir con las llamadas y los mensajes.

Tal vez era lo mejor, tal vez Felix ya no quería saber nada de él, y tal vez debían darse un tiempo para pensar mejor las cosas, tal vez solo estaba confundido.

Una vez más realizó una llamada, pero esta vez a alguien a quien no concurría hace tiempo, además de solo verlo en la escuela.

-¿Si?

-Hyunjin...

Su mejor amigo.

-¿Y ese milagro que me llamas? -contestó este con clara burla.

-Salgamos.

-Aw, me halagas, pero no me gustas de esa forma, lo siento.

-Idiota, no hablo de ese tipo de salir.

-¿En serio? Ya me había ilusionado- dijo aún en tono meloso.

-Ya deja de vacilarme-respondió harto-...¿Y por qué suenas más feliz de lo normal?

El contrario no respondió de inmediato. Le pareció raro.

-Uhm por nada-dijo con fingida tranquilidad-más bien, yo debería preguntarte por qué suenas tan decaído.

-Basta de preguntas y dime si podrás hoy en la tarde.

-Oh, ya veo, como en los viejos tiempos. No estoy seguro, déjame ver si no tengo nada en mi agenda y te aviso.

-De acuerdo.

Cortó.

Esperaba que Hyunjin aceptara.

La verdad es que no quería quedarse en casa, no quería tener que enfrentar sus emociones ni tener que encontrarle una razón para lo que había pasado.

Necesitaba distraerse, y en esos casos Hyunjin solía ser de mucha ayuda.

_______________________________________

Se encontraban en medio del centro comercial, en donde después de haber caminado sin rumbo por un buen rato, decidieron deternerse a comer.

Miró con molestia a quien se mantenía absolutamente absorto en su celular, tecleando con rapidez y riendo de rato en rato.

Debía suponer que tal vez se trataba de alguna de las nuevas novias de su amigo. Aunque a la vez le parecía extraño, puesto que Hyunjin tampoco era de ser tan enfocado en sus relaciones. Esta vez se veía muy entusiasta al respecto.

-¿Vas a estar todo el rato mensajeándote con tu novia?

El contrario elevó su rostro al fin para verlo con una cara muy despistada.

-¿Novia?

-Claro, ¿Acaso no estás saliendo con alguien otra vez?

-Ehm, no realmente, solo hablaba con un amigo- dijo el alto guardando su celular y procediendo a tomar de su bebida aún intacta.

-Ah- Imitó el acto contrario- Supongo que este tiempo un tanto alejados te sirvió para hacer más amigos.

-Algo así...además también para enfocarme en mis estudios, ya sabes, no ando mejor que tú en clases, y ya los profesores me tienen amenazado con las notas si es que no mejoro cuanto antes. Con decirte que encontré un tutor privado que me ha estado ayudando- dijo formando una amplia sonrisa sobre su rostro.

-Ah, si, algo así me mencionaste en la escuela.

-Es muuy lindo y adorable. Es de nuestra edad pero me llama hyung, deberías verlo, es una cosa demasiado linda. Me gusta molestarlo de vez en cuando.

-Es un chico entonces.

-Ehm...sí...- de pronto su entusiasmo se vio reducido, a veces se le olvidaba que la persona que lo tenía tan contento últimamente se trataba ni más ni menos que de un chico- y bueno, a veces salimos y eso, claro, como amigos.

-Entiendo- respondió Changbin notándose poco interesado.

No, en realidad no le interesaba en absoluto, su mente seguía divagando en otras cosas.

La imagen de cierto chico de adorables pecas llegó a su mente por milésima vez sin poderlo evitar.

De nuevo su ánimo se vio disminuido.

Ah, esta mierda apesta.

Centró su mirada en su viejo amigo quien jugaba con su comida, y notó el mismo desánimo en él.

Definitivamente esto le sabía a pura mierda.

¿Amor o amistad? esa es la cuestión 《Changlix & HyunIn》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora