Lightning

Vasallaje

Axel me empuja un poco mientras nos reímos por como Syrus parece molesto, carga la canasta llena de panes y el frío es tan fuerte que nuestras narices están rojas. Sonríe entrando a la casa, se supone que hoy hablaran del vasallaje. Pero todos estamos tan ensimismados, que casi lo olvido.

Parto el pan y Syrus pone la tetera, alzo la ceja.

- ¿no tiene casa? - hablo en un tono divertido, en invierno Syrus se queda aún más tiempos en nuestra casa. Supongo que no le gusta estar solo...

- mi chimenea esta fallando - miente, yo lo sé. Sonrió negando con la cabeza, Axel acomoda la comida recién comprado. Feliz de que era vez si lo dejamos comprar todo lo que quiso.

Encienden la tele de fondo, mientras nosotros hacemos la cena. Cuando comienza en discurso presidencial limpio mis manos y me acerco a la sala, mirando a través del marco la programación, el presidente Snow en un traje impecable. Hablando de la feliz que se siente por un aniversario más, me recargo en el marco y Syrus se acomoda detrás de mí.

- ¿Crees que le escriban los discursos alguien más? - pregunto con sinceridad y el se encoje de hombros.

- Ese viejo siempre a tenido una forma muy buena de hablar, lo dudo - admite, me permito reír por lo bajo. Observando como el sonido de la emisión aumenta, frunzo el ceño cuando el comienza a hablar más.

- En el cincuenta aniversario, como recordatorio de que murieron dos rebeldes por cada ciudadano del capitolio, todos los distritos enviaron el doble de tributos - esa idea me hace... querer vomitar. Recuerdo perfectamente ver algunas tomas antiguas, aquellos juegos se consideraron... irónicos por la temática irreal de la arena.

En el de veinticinco años, si no recuerdo mal. Se dieron selecciones, obligando a loa distritos a escogiera a sus tributos, casi puedo imaginar la desesperación y tristeza de la gente esa vez.

- Y ahora para nuestro tercer vasallaje de los veinticinco - toma al sobre, se supone que aquellas reglas para los vasallajes fueron escritas hace años. Lo abre y antes de leer en voz alta mira a la población- en el setenta y cinco aniversario, como recordatorio de que ni los más fuertes son rivales para el capitolio...

Me quedo callada, mirando la pantalla... con una sensación de malestar subiendo por mi estómago.

- Los tributos elegidos serán... del grupo de vencedores - termina y yo me tambaleó, siento a Syrus fallar también detrás de mí.

Todo me da vueltas y esas palabras se repiten en mi cabeza... de los vencedores. Mis ojos se ponen llorosos, no solo por la idea de que yo pueda volver... si no también por la idea de que los adultos que considero ahora mis cercanos... caerán también.

Escucho a Axel hablar, tomándome de los hombros para intentar hacerme reaccionar. Pero mi voz muere en mi garganta, comienzo a sentir desesperación real. Genuina después de años, él me suelta solo un segundo para intentar calmar a Syrus que parece a punto de vomitar. Escucho gritos, sollozos y de repente toda la aldea de los vencedores está en caos total, escucho a Columbae prometer a gritos que no dejara a sus hijos y unos minutos después a Syrus intentar calmar a Soren y Porter, ambas mujeres están en la puerta cayéndose de desesperación. Me obligo a salir en silencio por la puerta trasera, estoy dispuesta a correr cuando veo a... Gliese sentada en el césped. Yo grito con fuerza, golpeó la cerca hasta que mis manos sangran y pataleo hasta que la ira se convierte... en tristeza. Me giró a verla...

Su pelo blanco resaltando por el amanecer, mira al frente... ¿lo sabrá? ¿Sabrá que nuestros nombres estarán en la urna? Ella a sus casi 80 años... con la posibilidad de volver a la arena me hace querer llorar. Me dejó caer junto a ella, la mujer acaricia mi mejilla cuando casi me tiro a sus pies a llorar.

Me seca las lágrimas con cuidado, ni siquiera note cuando había comenzado a llorar y mira el cielo.

- Tu nombre no va a salir - admite y yo alzo la vista, aun acelerada y con el corazón en la mano - y si sale... yo me ofreceré.

Me quedo callada, sin entender. Ella sonríe con comprensión.

- Todos... tiene vida aquí, ya ninguno de nosotros es tan joven... las chicas tienen hijos - habla en un tono bajo, era verdad... la mayoría de las vencedoras tiene hijos o en el caso de Porter varios hijos animales - Yo ya voy de salida querida... ¿por qué no darles la oportunidad de ustedes llegar a la salida también?

Me que callada procesando aquello, niego con pesar... la van a matar en cuanto pise esa arena si se ofrece como voluntaria. Como siempre... él capitolio encontró la manera de lastimar desde el fondo hasta el exterior.

- Si sale mi nombre... te suplico que no hagas nada - pido con sinceridad - si sale mi nombre... iré y los acabaré.

Sé que en el fondo... muy en el fondo, ella tampoco quiere esto. Se va a ofrecer solo porque siente que nadie depende de ella... como nadie depende de mí. Ella dejo ya todo... listo, entiendo porque haría este acto de generosidad... pero no puedo aceptarlo sin más.

- No quiero... que nadie muera - admito con un hilo en la voz, ella asiente y sus ojos están un poco lloroso.

- Yo tampoco... pero espero que entiendas, que a veces es necesario dar el paso al frente para que los demás no lleguen a caer.