Cosecha

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Mis manos tiemblan, miro de reojo a la familia de Columbae y agradezco al cielo que no nos hicieran esperar en el escenario, veo a la población acomodarse. Parece... apenados y tan aliviados al mismo tiempo, acomodo mi ropa mientras veo como preparan los últimos detalles. Axel toma mi mano e intento pensar con claridad, ¿cómo podían hacernos esto? ¿Por qué no nos dejan en paz?

Sostengo la mano de Axel, Syrus me mira desde la zona de tributos masculinos. Baja la vista y yo me mantengo a cómo puedo de pie, las cámaras se encienden y me obligo a verme menos temerosa de lo que estoy.

El discurso comienza y Axel aprieta mi mano, a diferencia de los demas... no me dejo intimidar. Miro al frente como si no nos estuvieran mandando a morir, recuerdo las palabras de Finnick. No muestras debilidad, no ante las cámaras.

Cuando Cornalius se acerca a nosotros pasando su mano por la urna. Me mira con... pesar, niego y él toma aire. Mi pobre hombrecillo verde... después de nosotros se lo mucho que le pesa, al final... creo que el logro notar lo que el capitolio hace... por lo menos nos que nos hizo a mí y a Reus, sé que eso... le pesa.

La tensión nos atrapa mientras él escoge uno de los cinco papeles, cuando comienza a abrirlo escucho a las demás... contener el aire y las posibles lágrimas. Yo no me inmutó, obligándome a mirar al frente.

- Columbae Clackmannan - todas alzamos la vista y yo me congelo, siento a Columbae temblar... mirando alrededor. Mira a su esposo que ya tiene a una de las niñas en brazos, entonces se gira a mí y comienza a pasarme al bebe en sus brazos. Su esposo intenta tomarla del brazo, pero los agentes de la paz ya la están haciendo caminar.

Axel suelta mi mano y sostengo al pequeño con... pánico. Miro a todos lados, sin saber qué hacer. La ceremonia sigue mientras lo termino de procesar, la hija mayor de Columba suelta algunos sollozos y yo aprieto al bebe contra mi, este re renueve... buscando a su madre con lentitud.

Se da un silencio, no sé qué hacer. Siento algo arder en mi pecho mientras el tributo masculino es elegido, rezo. Rezo a quien sea, a lo que sea que Syrus se quede. Si Syrus se queda...

- Quarth Spengaius - hazlo la vista y Quarth suspira mirando alrededor, le dice alfo a mi mentor que parece... al borde del llanto. Syrus abraza al hombre, supongo despidiéndose entre jadeos adoloridos. Todo da vueltas y mientras, él sube al escenario él bebe en mis brazos comienza a ponerse intranquilo veo de reojo a Gliese quien toma su bastón preparándose para ponerse de pie. Todo es tan... rápido.

El bebe pelinegro llora, las hijas de columbae forcejear con un agente de la paz. Se quedarán solas... su padre las cuidará, pero no hará todo lo que hace Columbae. Ella las cuida, ella hace comida, enseña lecciones, me prepara cena... Axel toma mi brazo.

Por inercia, pensando en mil cosas al segundo alzo mi brazo.

Columbae tiene familia, esposo, a quien cuidar. Gliese merece morir en paz y ni en un espectáculo, son grandes... muy grande. Más de 40 años, soy más joven, más ágil. Tengo buena forma... Syrus me obliga a entrenar a veces. Aun se lanzar... yo tengo muchas más posibilidades... de salir viva.
Axel podría sostenerse solo si yo... no regreso, Syrus lo cuidara. Él bebe llora más fuerte y mi mano está ya en el aire.

Las cámaras se giran a mí, Axel intenta bajar mi mano y yo solo miro a Columbae. Escucho a Syrus gritarme, pero a este punto ya estoy aceptando que me ofrezco como voluntaria... camino entre la gente. Columbae baja corriendo del escenario, me abraza suplicando que dé un paso atrás. Yo solo miro al pequeño que deja de llorar cuando siente las manos de Columbae sobre él, cuando su bebé se aferra a ella comienza a agradecer... agradecer una y otra vez, los agentes de la paz tienen que apartarnos. Le doy al bebe con cuidado y me obligo a sostener la estupidez que acabo de hacer.

Veo a todas las vendedoras llorar, llorar genuinamente... creo que por mi. Syrus golpea a un agente de la paz e intenta llegar a las escaleras. Me toman del brazo y la ceremonia termina antes de que el caos se propague.

Las puertas se cierran y veo esa expresión en el rostro de Axel... esa misma que vi hace años, entonces entiendo el peso de mi decisión.

Supongo que ya no puedo dar un paso atrás... pero como diría alguien sabio. A veces debes dar un paso al frente, para que los demás no terminen cayendo igual.

 A veces debes dar un paso al frente, para que los demás no terminen cayendo igual

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Hola, con este capítulo oficialmente cerramos la primera parte de este fanfic. Seré sincera planeo hacer solo dos partes, más una especia de extra con todas las cartas entre Finnick y Sara, estoy muy feliz de terminar un tercio de esta historia que estuvo varios meses en mi cabeza, espero que les gustara y nos vemos pronto.

Gracias por leer :]

LightningDonde viven las historias. Descúbrelo ahora