Su esperanza moría a cada día que pasaba lejos de su hijo. Cuando supo que estaba en espera de un bebé todo su mundo se derrumbó ¿Cómo su cuerpo sería capaz de engendrar al hijo de un mafioso, de un hombre malo en el cual confío?
Por el cual se dejó deslumbrar.
Su mente la engañaba con facilidad diciendo que debía deshacerse de ese pequeño cuanto antes, sin embargo, su corazón e instinto maternal le pedían continuar con la vida del bebé. Darle una oportunidad de vivir cuando él no pidió venir al mundo y mucho menos eligió a su padre.
MinHee estaba perdidamente enamorada de ese hombre mucho mayor que ella, no obstante, cuando su sospecha bien infundada por las señales que recibió a lo largo de su relación con Seo Joon le confirmaron la vida oscura que llevaba el hombre, marcó el final de la relación.
Nunca pensó que ese hombre dulce y amable que iluminó su vida, así como le dio luz a su camino se la quitaría de igual forma.
Su embarazo fue la gota que derramó el vaso.
Huyó del mafioso.
Pero Seo Joon fácilmente dio con ella.
Su embarazo no fue como el que cualquier mujer a espera de un bebé pasaba, no. Cuando huyó del mafioso tenía apenas un mes de embarazo y cuando éste la encontró su vientre estaba muy abultado con ocho meses de gestación. Durante los primeros meses que logró vivir lejos del mafioso, vivió rodeada de miseria, nadie quería contratar a una mujer embarazada. No tenía familia a quien recurrir, mucho menos amigos. No obstante, una noche fría de invierno dos almas bondadosas se cruzaron en su camino.
Aún lo recordaba a la perfección.
Un chico de mirada penetrante, bajito y labios en forma de corazón extendió sus manos entregando un poco de comida y de paso el abrigo que lo cubría del frío. Ella se encontraba sentada en un rincón de la calle abrazándose así misma, tratando de cubrir del clima violento a su vientre. Sin embargo, cuando el chico amablemente le tendió su abrigo ella se hubo movido para colocarlo mostrando su apenas visible vientre de cuatro meses.
" No podemos dejarla aquí, Kyungsoo" fueron las inmediatas palabras del hombre alto y Moreno. A petición del alto, la pareja de amigos terminó esa noche con la miseria en el exterior de MinHee, más no con la que habitaba en su interior.
- Parece que mi vida siempre será una pesadilla - se dijo para sí misma, esa mañana las ganas de comenzar su día laboral se habían esfumado, su hijo pasaba un día más sin estar a su lado y eso la entristeció. Suspiró- De la cual nunca despertaré.
Su agobiante mañana mejoró cuando en su campo de visión se cruzó ese chico que pese a la situación por la que atravesaban, había sido un rayito de luz en su vida. Podría decirse que lo consideraba su amigo.
El asistente lucía decaído, sus pasos se notaban pesados como si el deseo de dar un paso más se esfumaba conforme avanzaban.
- ¡Hey Baekhyun! - saludó MinHee con la típica sonrisa que llevaba durante su día de trabajo - ¿Será que podamos conversar un poco? - parecía que la chica no se rendiría tan fácil con Baekhyun- Te lo ruego ¿Sí?
Baekhyun suspiró, frustrado, cansado, exasperado. Quería cerrar los ojos, volver a abrirlos y ver la claridad de la luz resplandecer nuevamente en su vida.
- Claro.
Constructora Park era un lugar "seguro" para ambos, ahí nadie que perteneciera a la mafia Blue Dragón se atrevería a entrar. Se dirigieron a la cafetería y ocuparon una de las mesas más alejadas del lugar.
Baekhyun pidió simplemente un café negro bien cargado, no era su favorito pero en ese momento serviría para despertar un poco y MinHee un té de tila para relajar sus nervios.
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❤Secuestr♡ de Amor🖤 (ChanBaek)
RomancePark Chanyeol cree que todos estarán a su disposición, que al igual que todos los que han tenido el puesto de asistentes Baekhyun caera rendido a sus pies. No contaba con que Byun Baekhyun no fuera la misma clase de asistentes que acostumbraba. - S...