Capítulo 11 : Promesas rotas

30 0 4
                                    

Antes de despertarme, lo primero que siento es como un líquido caliente comienza a caer en mi cara, acompañado de un olor algo desagradable. Abro mis ojos y suspiro: "Buenos días, Chucho... Yo también te quiero, pequeño meón." Hago una leve mueca de asco mientras tomo al perro y lo aparto, tomando una botella de agua y una camiseta sucia para limpiar mi cara. "Me pagarás esta," le digo señalándole con el dedo. Este simplemente emite un pequeño ladrido. "No me hagas pucheros, no puedes mearte en mi cara y luego no esperar  que no  te regañe." Suspiro, termino de limpiarme la cara, miro la hora y comienzo a vestirme.

Luego de preparar las cosas para esa noche, miro al perro y suspiro: "Ven aquí Chucho." El animal no tarda en acercarse a mí, dejándose cargar. "Te voy a tener que dejar con un amigo, espero que te portes bien. De paso buscaré un nombre para ti." Miro mi teléfono donde había recibido una notificación de una aplicación llamada Yuka. Miro al perro unos segundos: "Yuka es de mujer... Mmm, Huka es un apellido eslovaco, no sé si sirve para un perro, pero así te quedas."

Cargo a Huka en brazos, tomo mi "maleta" de mano y salgo de la habitación. Paso por las habitaciones hasta llegar a la del sargento Soap. Toco suavemente la puerta esperando a que este la abra, lo cual no tarda en suceder.

Sargento Soap: "¿Lo ha visto alguien?"

"Nadie, señor, no ha vuelto a escaparse. Tome." Saco a Huka de mi chaqueta y se lo entrego al sargento.

Sargento Soap: "Bien, recuerda que esto solo es por esta vez, recuerda el trato."

"Sí, señor, un buen cargamento de ron para San Patricio. Ya, ya," murmuro mientras dejo las cosas de Huka en su puerta. "Gracias otra vez, sargento."

Sargento Soap: "No es nada, ahora ve, vas a llegar tarde a la reunión. Además, vigila al teniente por mí."

Lo miro algo confundido. Este solo me sonríe pícaramente mientras cierra la puerta. No sé qué quería decir, pero bien por él.

Llegando a la sala donde supuestamente nos íbamos a reunir para repasar un poco el plan, veo a Mateo y Ashley hablando entre ellos. Por la cara de Mateo parece haber recibido una buena hostia mental, por otro lado, Ashley parecía asustada. Niego levemente mientras entro, no iba a molestarles, después de todo eso eran cosas de parejas y no debía meterme.

Cuando todos ya están sentados, la sesión informativa comienza. Lo primero es que nos muestran una serie de casas y edificios en mal estado, además de un poco de actividad reciente en esa zona.

Teniente Alex: "Muy bien, todos ya saben que esta noche iremos a Yemen, en una de sus fronteras está situada esta pequeña concentración de casas, parcelas mejor dicho. Según sabemos, nuestro objetivo hará algún intercambio mañana en la noche, por lo cual nosotros, el Destacamento Delta 41, debemos terminar lo que empezamos desde un principio. El soldado Jonathan, el sargento Marck y yo seremos los que buscaremos y daremos caza al objetivo, somos el grupo Alfa. Luego, gracias a la colaboración del Destacamento Task Force 141, al darnos algunos soldados, estos se harán cargo de limpiar y abrirnos paso hacia nuestro objetivo, siendo el equipo Beta. Luego, Kirill y Mateo nos ayudaréis desde lejos, si se os necesita tendréis que entrar en acción y ayudarnos. Vosotros seréis el equipo Omega. Kirill... Luego nos acompañarán dos enfermeras, ya que allí en Yemen la asistencia médica es una mierda."

Todos miramos a la puerta, viendo entrar a María y a Ashley. Noto cómo Mateo se atraganta y comienza a toser. Lo miro desconcertado y le doy palmaditas en la espalda para que se relaje. Este no me mira, ni me agradece, simplemente mira a Ashley fijamente. Suspiro por su ignorancia hacia mí y miro a Alex.

Teniente Alex: "Todos prepárense para esta misión, descansen lo que puedan."

Todos asentimos y nos levantamos. Tomo mis cosas y decido ir a darme una última ducha, comer y hacer poco más... Después de todo aún quedaban horas para llegar a Yemen.

Tras La MiraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora