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Tiempo después entraban a la mansión Danvers donde ya se encontraban todos reunidos. Antes de entrar Lena toma la mano de Kara, ella trata de apartarla pero la chica se lo impide. El primero en saludarlas fue Lionel Luthor haciendo notar la belleza de las chicas. Lena traía un hermoso vestido negro con un escote muy provocativo resaltando sus bellos atributos. En otro momento Kara no podría mirar para otro lado que no fueran los pechos de Lena, y su esposa lo sabía por eso se había vestido así pero su decepción era mayúscula porque para Kara ella era al parecer invisible. Kara vestía pantalones negros de seda acompañados de una  blusa Blanca con botones dorados que le lucia hermosa. Ambas llevaban el pelo suelto. Después de Lionel siguieron saludando al resto de la familia. Lilian, la madre de Lena, Eliza y Jeremiah los padres de Alex y Kara, y al final Alex y Samantha Arias quien además de ser la mejor amiga de Lena era la novia de Alex. Lex era el gran ausente, siempre que podía evitaba todo contacto con la familia.
- Ustedes sí que se hacen esperar bonitas. - dijo Sam.
- Puedo imaginar el motivo de la demora, par de pervertidas, tanto tiempo ya junto a Lena y mi hermanita aún le es imposible mantener las manos lejos de ella. Sin miraditas Danvers o vas a negar que casi tuve que traerte a rastras hoy. Seguro que te fastidié cualquier plan guarro que tenias pensado para hoy con tu esposa. A que si. - dijo y todos sonrieron logrando que Lena se sonrojara.
- Jajaja, muy graciosa Alexandra. Si no tienes nada inteligente que decir lo mejor es que te mantengas calladita, así te ves más Bonita. - le responde Kara muy molesta mientras se dirige hacia las bebidas para servirse un whisky.
- Ahora si me acabas de confirmar con tu mal humor que tengo razón en lo que digo. Calma Kar tienen luego todo el resto de la noche y lo que les queda de vida. - Kara la fulmina con la mirada.
- Basta ya amor, dejalas en paz. - dijo Sam al ver que Alex no se percataba de la incomodidad de Kara.
La noche transcurría tranquila sin mayores incidentes después de eso, todos conversaban animadamente en la sala de la casa. Kara se encontraba sentada en uno de los butacones por lo que Lena aprovecha para sentarse de forma sensual en el brazo del mueble quedando su espalda recostada en gran parte del pecho de su esposa. Kara se remueve incómoda por el contacto Lena la ignora y en su lugar comienza a acariciarle el cabello, la oreja y su mejilla como sabía que tanto le gustaba. La joven le lanza una dura mirada para que terminara con eso.
- Kara queríamos felicitarte, vimos el gran desempeño que tuviste en el caso de ese muchacho, de no ser por ti hubiera terminado en la cárcel de por vida. - decía su padre.
- Gracias. Fue duro pero lo logramos, fue difícil pero logramos conseguir las pruebas de su inocencia.  - ella casi no podía concentrarse en lo que hablaba debido a las caricias de Lena.
Si la joven pensaba que le estaba gustando o que la provocaba era todo lo contrario, Lena estaba consiguiendo el efecto contrario, cada caricia estaba despertando una una ira ciega en Kara que estaba a punto de explotar.
- Imagino. En las noticias decían que lo habían atrapado saliendo de la escena del crimen y que sus huellas se hallaban por todo el lugar, y para rematar le encontraron un trapo con el que se suponía había limpiado sus huellas de la puerta.  Al enterarme que tomaste el caso llegué a pensar que habías enloquecido hija, es la verdad. - sonrió Jeremiah.
- Esas mismas suposiciones hicieron los policías y eso provocó que cometieran miles de errores los cuales me ayudaron a mi equipo y a mi a encontrar la verdad. - iba a continuar hablando pero ya le era imposible,  no podía soportarlo más. - Puedes dejar de hacer eso, para ya de tocarme con un demonio. - gritó levantándose bruscamente de su asiento haciendo que Lena casi cayera.
Todos miraron sorprendidos y fue en ese momento donde se percató de lo que había hecho.

Lena la mira asombrada y muy a su pesar comenzaron a salir lágrimas de sus ojos que no pasaron desapercibidas para el resto de los presentes que miraron a Kara acusadoramente. Kara le lanza una mirada de odio que no pudo evitar, "claro Luthor, agregale un poco de lágrimas a la trama para terminar de hundirme de una vez por todas". Lo que la joven estaba lejos de imaginar es que esta vez esas lágrimas eran auténticas, su esposa no fingía, su reacción había causado tanto dolor en Lena que por más que lo intentaba no podía evitar llorar. Kara estaba roja de la ira y la vergüenza, no sabía que decir o hacer ante las miradas de desaprobación y decepción  que estaba recibiendo de toda su familia. Ella nunca se había comportado de forma tan violenta, "maldición Lena, qué has hecho. Por qué me odias tanto, por qué me haces esto frente a mi familia?" Era todo lo que pasaba por su mente. La primera en reaccionar fue su madre.
- Kara, qué significa esto?
- Me puedes explicar jovencita que maneras esas de tratar a mi hija. No lo voy a permitir. - resopló Lilian casi a los gritos.
- Esa no es la educación que te dimos Kara. Estoy esperando una explicación seguida de una buena disculpa. - le exigía su padre y ella solo podía pensar que era el colmo del descaro que ahora tuviera que disculparse también con Lena por sus locuras cuando la única víctima real ahí era ella.
A Kara le costaba trabajo articular palabra alguna, su enojo e impotencia se lo impedía. Era visible lo mal que estaba y solo salían lágrimas en lugar de palabras. Entonces pasó lo inesperado.
- Es mi culpa, lo siento, no debíamos estar aquí hoy sino en casa solucionando nuestros problemas. - dijo Lena sin más, Kara la miró "qué diablos tramas ahora mujer". - Por eso es que ella no quería venir Alex y el motivo de nuestro retraso, nada que ver con lo que insinuabas cuñada. Ojalá fuera tan sencillo como arrastrarla a nuestra cama para así poder recordar cuanto nos amamos. - esto último lo dijo mirando directamente a Kara a los ojos, haciéndole dudar por un segundo pero casi de inmediato regresó a su mirada fría e inexpresiva.
- No entiendo nada. - exclama Lionel. - Pero cual sea el problema no justifica la forma en que Kara te acaba de tratar hija.
- Papá por favor, todos sabemos que Kara me adora.
- Por eso el tamaño de la sorpresa de todos. - dice Alex
- Estoy de acuerdo con tu padre hija, cualquier cosa que haya pasado entre ustedes no puede justificar el comportamiento de Kara.
- Mamá por favor, no sabes por qué está tan enojada.
- Sigo pensando que es una reacción exagerada.
- Basta mamá. No te inmiscuyas en mi matrimonio y no voy a permitir que hables o pienses mal de mi mujer. - Kara seguía sin entender las intenciones de la loca que tenía por esposa.
- Disculpa, pero nos hicieron participes desde el momento justo que nos obligaron a presenciar semejante escena tan deprimente hija. - reprocha el patriarca de los Luthor.
- A ver papá. Dime cómo reaccionarías tú  si estuvieras casi seguro que tu esposa, la mujer que tanto amas, te ha sido infiel con uno de sus socios. - los ojos de Kara casi saltan de sus órbitas de tan abiertos que los tenía, no podía dar crédito a lo que acababa de escuchar. "Esta mujer no tiene fondo, cuando creía que ya no podía caer más ahí estaba Lena Luthor superándose".
Al parecer Lena no estaba dispuesta a dejarla ir aún, ella había perdido los estribos pero ahí estaba Lena para arreglarlo todo aunque se hundiera en el proceso. Ahora solo tenía una pregunta bullendo en su cerebro, "cómo pudo estar tan ciega con esa mujer al punto de enamorarse de alguien asi"
- Lena!! - Kara gritó suplicante.
- Qué estás tratando de decir Lena, que le fuiste infiel a mi hermana- pregunta Alex casi a los gritos, era muy sobreprotectora con su hermana menor.
- Calma amor ella no dijo eso, cierto Lena. - Sam le abría los ojos para que arreglara el semejante lío que había creado.
Samantha era la única de los presentes que conocía la verdadera situación en la que vivían esas dos hacía años. Temía por la salud de su propia relación si alguna vez Alex llegara a enterarse del calvario en el que Lena hizo vivir a su hermana y que ella estando enterada de todo nunca le dijo nada. Estaba segura que nunca se lo perdonaría, " por dios Alex me va a matar".
- Claro que no Alex, yo amo a tu hermana. - esa afirmación salió del fondo de su corazón, era lo más sincero que había dicho en los últimos tiempos pero solo recibió como respuesta una sonrisita irónica por parte de Kara que no pasó desapercibida. "Ya no podía creerle nada". - Sé que ahora lo puedes dudar amor pero eres todo para mi, eres mi mundo entero hermosa. Te lo dije y te lo repito con nuestra familia d testigo, te amo Kara. Lo que viste fue una trampa de ese estupido, él te vio llegar por eso me besó. Créeme, por qué crees en otras personas que solo nos quieren destruir en lugar de escuchar a tu esposa, la mujer que te ama, la mujer que escogiste para compartir la vida amor. - seguía llorando a mares.
- Ven amor, calma, calma. - Lilian se acercó para tomar a su hija entre sus brazos que no paraba de llorar.
- Kara hija, mirala, no creo que esté mintiendo. Sé que tienen que sentarse a conversar eso no se resuelve tan fácil, pero hija no ves que Lena esta sufriendo.
Kara quería gritar, salir corriendo de ahí, no podía creer lo que estaba sucediendo. Aún no daba crédito al semejante circo que había montado Lena y ella se sentía la mayor de las payasas.
- Comprendo que te sea difícil creer en mi amor después de todo lo que viste en la oficina. Te entiendo porque yo estaría hasta más enojada que tú pero hablemos y escuchame solo un momento más por favor. Yo te amo Kara. - ya no pudo más, era demasiado para soportar. No aguantaba tanto cinismo.
Kara no podía ver que Lena le estaba dando un mensaje entre líneas que ella en otro momento hubiera captado al instante pero ahora no podía. Había sufrido tanto, Lena la torturó y la humilló tanto que le había secado el corazón y la habilidad de entenderla con solo una mirada. Kara era incapaz de razonar sobre cualquier cosa que saliera de la boca de Lena o tuviera que ver con ella.
- Basta ya Luthor no digas ni una palabra más. Deja de mentir por dios. Quién eres, cómo me pude enamorar de una mujer como tú? Eres un maldito monstruo, un demonio que se regocija con mi sufrimiento y ni sé por qué lo haces porque tengo la certeza de no haberte dado ni un puto motivo porque lo único malo que he hecho es amarte desde que te conozco maldita loca. - la miró a los ojos y Lena por primera vez reconoce todo el dolor que había en ellos, por primera vez en dos años le creía a su esposa al escucharle decir que la amaba. - Respondeme algo Lena Luthor,  dime mirándome a los ojos, por qué mierda me odias tanto si lo único que he hecho es amarte como una demente. Me has amado en verdad alguna vez Luthor? Respondeme maldición. - gritó ahogada en sus propios sollozos.

Lena estaba conmocionada por las palabras de su esposa y no podía decir nada, ver el sufrimiento real en ella la había paralizado. En ese momento el velo de odio y obstinación que por tanto tiempo la cegó comenzaba a caer dejándole ver el destrozo que había hecho con su vida y el trato injusto e inhumano que le había dado al amor al amor de su vida.

El resto de los invitados les era imposible entender que pasaba. Kara no lo pensó más, no podía continuar ahí. Salió corriendo sin escuchar palabras iba cegada por la ira.
- Kaaraaa. - Lena llamó, pero ella ya no la escuchaba. Nunca más la volvería a escuchar.

Por primera vez el miedo real ataca a Lena, ya no estaba tan segura de haber hecho lo correcto. Ya no creía que Kara le había mentido y mucho menos la utilizaba. Lloraba abrazada a si misma entendiendo el significado de aquella terrible revelación. Habia sido cruel con la persona que más la amaba en esta vida que coincidentemente es la persona que ella más ama. Se llevó las manos al pecho y su llanto se transformó en un grito seco al darse cuenta que en sus ansias absurda de venganza no solo había destruido a Kara sino que había acabado con su propia vida, no se podía ser más patética.
- Deja a mi hermana en paz. Voy tras ella mamá no te preocupes. A mi regreso me vas a explicar con lujo de detalles que es lo que está pasando aquí realmente porque estoy más que segura que tú lo sabes Samantha Arias. - le dijo a su novia en un susurro antes de salir.

Sam mira a su amiga con enojo disfrazado de reproche, no solo había acabado con su matrimonio sino que estaba poniendo en riesgo su relación. Sam se preguntaba en que momento la noche se había torcido tanto, si lo único que ella quería era anunciar su compromiso con Alex a la familia. "Maldición Lena qué has hecho, mira que te lo advertí. Si serás terca mujer". Era en lo único que podía pensar

Todos en la casa quedaron muy sorprendidos con lo sucedido. Kara se había marchado en malas condiciones y ahí quedaba Lena sumida en un mar de lágrimas.

Esclava de lo que calloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora