Salgo de la cabaña de Hagrid bajo la insistencia de Hermione. Después de haber gritado abiertamente mi gusto por los chicos, me sacó prácticamente a patadas mientras golpeaba a Weasley, por cuarta vez, creo.
Mientras camino hacia el castillo, las luces encendidas me recuerdan que me perdí la cena en el Gran Comedor. Espero que Pansy me haya cubierto, si no, es probable que termine cumpliendo un castigo con Snape. Aunque se ha vuelto algo amable conmigo, sigue siendo cruel cuando se enoja, y no quiero pasar la noche limpiando trofeos o fregando orinales.
De repente, un impulso extraño me guía hacia el campo de Quidditch, como si una suave brisa me envolviera y jalara mi corazón hacia allí. La sensación me recuerda al hechizo de la Dulzura, que me trajo a este tiempo. Sin dudarlo, sigo esa intuición.
Camino bajo la luz de la luna, y al entrar al campo vacío, me invade un extraño silencio. Mi vista se dirige a las gradas, y me detengo al reconocer la silueta de alguien sentado en medio de la oscuridad. Harry está allí, iluminado solo por la luna. Lleva puesto su uniforme de Quidditch, con su Nimbus 2000 a su lado. Está mirando las estrellas, su rostro reflejando una tristeza que rara vez muestra. Me siento un intruso en un momento de vulnerabilidad.
Sin querer, piso una ramita que cruje, y él se vuelve con rapidez, apuntándome con la varita. Vacila un momento y luego la guarda, mientras yo suelto un suspiro de alivio.
—Lo siento, no sabía que estabas aquí. Yo... me iré —digo, intentando sonar neutral mientras me doy la vuelta.
—Espera, Malfoy —responde Harry, con una urgencia que me detiene. Giro lentamente, con el corazón latiendo más rápido.
—¿Sí? —logro decir con voz tranquila, aunque siento que la situación podría cambiar en cualquier momento.
—Siéntate —dice, señalando un lugar a su lado.
—¿Aquí? —tartamudeo como un idiota.
—Sí, aquí. Quiero hablar contigo —contesta, y en su voz percibo una firmeza que me sorprende.
—Está bien —respondo con voz ronca, tomando asiento a su lado, aunque dejo un par de lugares vacíos entre nosotros.
Harry alza una ceja, divertido.
—¿Por qué te sentaste tan lejos?
—No quiero incomodarte con mi presencia.
Él me observa con sus brillantes ojos verdes.
—¿Crees que me incomoda?
—S-Sí —admito, sintiéndome un poco tonto.
Harry asiente con la cabeza y vuelve a mirar al cielo. Nos quedamos en silencio por varios minutos, pero la quietud es cómoda. Bajo esta noche estrellada, casi puedo olvidar que Harry me odia y que hay una guerra inminente. Casi, si no fuera porque estoy perdidamente enamorado de él.
—Hermione me dijo que querías disculparte con Ron y conmigo —dice Harry, sin apartar la vista de las estrellas.
Observo su perfil iluminado por la luna, y es tan perfecto que me resulta imposible apartar la mirada.
—Acabo de disculparme con Weasley, en la cabaña de Hagrid. Quería decirte que lamento mucho lo que dije en primer año —murmuro, mirando las estrellas—Estaba dolido porque rechazaste ser mi amigo.
Harry suelta una pequeña risa.
—Fuiste bastante cruel con la familia de Ron.
—Lo sé, y lo lamento profundamente. Era un niño mimado... —mi voz se apaga mientras recuerdo cómo era antes—Todo lo que creía saber me lo inculcaron mis padres. Mi padre... siempre quise que se sintiera orgulloso de mí. Eso no es excusa, pero es la única vida que he conocido. Aún así, lamento el daño que he causado.
![](https://img.wattpad.com/cover/368880287-288-k752329.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Draco Malfoy y la Magia de los Retratos [Harco] [Editando]
ФанфикDespués de la guerra mágica, Draco Malfoy se encuentra desconsolado por la boda de Harry Potter con Ginny Weasley, bebiendo sin control en un sucio sótano. Pero todo cambia cuando se encuentra con un retrato de su antepasado que fue exiliado por la...