Volviendo A Amar | Sasuke Uchiha | Canon × OC

23 | ¿Él está bien?

Kahori Okkotsu.

Llegué junto con mis compañeros, recibiendo un abrazo de Sakura gustosa. Y aunque estuviera algo cansada, sonreí por momentos, hasta que Kakashi se presentó ante mi.

—¿Y Sasuke? —pregunté cuando mi combate terminó. Kakashi Sensei estaba en las gradas junto a Naruto y Sakura, pero Sasuke no estaba con él.

—Él estará bien —respondió con calma. Fruncí el ceño sin creerle un poco.

—¿Dónde está? —cuestioné desesperada. Para él 'estar bien' significa: no morir. Solo me ponía de los nervios que no quisiera decírmelo.

Me observó con atención, y giró hacia mi. Sus manos tomaron mis hombros deteniéndome con seriedad.

—¿No quieres ver los enfrentamientos de tus compañeros? —cuestionó, no me inmute, esa cuestión no calmaba mi miedo. —Apenas Naruto y Sakura terminen aquí te llevaré con él, ¿De acuerdo?

Insegura, asentí con la cabeza. Solté un último suspiro observando el siguiente combate, manteniéndome entre mis compañeros.

Narrador.

Kakashi al pasar de los minutos tuvo retirarse una vez más, pero esta vez, Kahori trato de no pensar mucho en eso. Aunque no lo pareciera, su Sensei sí estaba preocupado por el joven Uchiha.

Después de encontrar a Kabuto tratando de usurpar la habitación donde Sasuke se estaba recuperando, creyó que con su protección, podría traer a Kahori para que lo viera. Definitivamente, su definicion de 'estar bien' la pondría a llorar.

—¿Qué demonios?

Kakashi giró sobre sus talones sintiendo una gran fuente de chakra en la habitación, una mujer de cabello negro. En éste momento apenas asimilaba la rapidez con la que llegó.

—Señorita, alejese de él.

La mujer no se inmutó, sentándose con cuidado sobre la orilla de la cama, acariciando con cuidado el rostro de Sasuke. Kakashi permaneció callado, caminando hasta ella. Notó sus ojos llorosos y la reconoció.

—¿Señorita Okkotsu?

—¿Quién fue? —susurró herida. Su mano descansó sobre la frente de Sasuke aplicando ninjutsu médico,y su otra mano replicó su acción en uno de sus costados.

—No importa, no hay nada que pueda hacer.

—Si, es algo a lo que me he resignado estos días —susurró dando un suspiro, tratando de no lagrimear para no provocar su tos. — Solo veo a mis niños llegar a mis brazos heridos, llenos de moretones y marcas de guerra que jamás podré borrar.

Sasuke tocio levemente, Ume quita con cuidado la máscara de oxígeno, poniendo dos de sus dedos sobre su frente sin detener su ninjutsu. Kakashi se compadeció de ella, aún así no había mucho que pudiera ser. Esa era la vida de un ninja.

—No es algo por lo cual sentirse culpable.

—Lo sé, aún así, me siento inútil.

—Créeme...—. Kakashi apoyó su mano ligeramente sobre su hombro. —Yo también.

Nunca había visto en primera mano la preocupación de Ume. La reconocía por que había tenido misiones en AMBU con mantenerla al margen.

No parecía ser una mujer a la cual necesitan tener vigila. Esa parte siempre lo confundió. No había cambiado mucho.

—¿Kahori lo sabe?
—Estaba apuntó de traerla.

Ume no dijo nada más, resoplando tratando de contener sus lágrimas. Cuando su Kahori entró por la puerta se quedó en blanco. La notó ahí, y mover sus pies hasta la cama fue algo instintivo. Kakashi observó la escena con atención.