SHUUMATSU NO VALKYRIE x MAJO TAISEN

QIN SHI HUANG VS HADES

En el balcón de los dioses, la tensión era palpable. Las sospechas sobre el panteón andino aumentaban con cada momento que pasaba después de ver a Amaru correr a atender a Túpac Yupanqui. Huiracocha observaba todo con una expresión serena, pero no se sorprendía.

Huiracocha: (con voz calmada) Mi hijo Amaru siempre fue benevolente. Es la antítesis de Aranway, quien encarnaba la maldad pura.

Odin: (mirando a Huiracocha) Aranway murió enfrentándose a Amaru, ¿correcto?

Huiracocha: (asintiendo lentamente) Así es. Amaru tuvo que detenerlo, a pesar de ser su hermano. Fue un sacrificio necesario para mantener el equilibrio.

Zeus: (con preocupación) ¿Y estás seguro de que Amaru no sigue sus pasos?

Huiracocha: (con firmeza) Amaru no es como Aranway. Él valora la vida y la justicia. Su preocupación por Túpac Yupanqui lo demuestra.

En el balcón de la humanidad, el ambiente era de urgencia y esperanza. Florence Nightingale, Alexander Fleming y Santa Rosa de Lima atendían a Túpac Yupanqui con diligencia y dedicación. Junto a ellos, muchos chamanes andinos realizaban rituales ancestrales para sanar al caído.

Florence Nightingale: (con voz calmada y autoritaria) Necesitamos más vendas aquí. La hemorragia no se detiene.

Alexander Fleming: (preparando un antiséptico) Esto debería ayudar a prevenir infecciones.

Santa Rosa de Lima: (rezando mientras aplica ungüentos) Que el Señor nos guíe en esta hora difícil. Su vida está en manos divinas.

Los chamanes cantaban en quechua, sus voces resonando en el aire mientras realizaban movimientos rituales alrededor del cuerpo de Túpac Yupanqui.

Chamán 1: (con voz profunda) Pachamama, danos tu fuerza y sabiduría para sanar a este guerrero.

Chamán 2: (alzando los brazos) Apus, espíritus de las montañas, protégelo y tráelo de vuelta a nosotros.

En las gradas, los demás participantes observaban con preocupación y esperanza, susurrando oraciones y palabras de ánimo.

Tomoe Gozen: (con seriedad) Túpac es fuerte. Ha enfrentado a la muerte antes y ha sobrevivido.

Sasaki Kojiro: (asintiendo) Tiene la voluntad de un verdadero guerrero. Volverá a levantarse.

Alexander Fleming: (mirando a Florence) ¿Cómo está?

Florence Nightingale: (sin dejar de trabajar) La situación es crítica, pero no desesperada. Tenemos que seguir luchando.

En el balcón de los dioses, Hades observaba la escena con una expresión pensativa, mientras Ares mostraba su impaciencia.

Ares: (gruñendo) No deberíamos interferir. Esto es una batalla, no una sesión de primeros auxilios.

Hades: (calmado) Ares, la verdadera fuerza no reside solo en la batalla, sino en la capacidad de proteger y sanar a los nuestros.

Mientras tanto, en el balcón de la humanidad, Brunhilde estaba atenta a cada detalle, consciente de la importancia de cada vida en esta guerra.

Brunhilde: (con voz firme) No podemos permitirnos perder a ningún guerrero. Cada uno es crucial para nuestra causa.

Florence Nightingale: (mirando a Brunhilde) Estamos haciendo todo lo posible. Pero necesitaremos tiempo.

Brunhilde: (asintiendo) Haced lo necesario. La humanidad depende de ello.

Heimdall se posicionó en el centro de la arena, su voz resonando con autoridad y solemnidad mientras alzaba su cuerno para anunciar el inicio de la siguiente ronda. La multitud se silenció expectante, los corazones latiendo con anticipación.