En el panteón shintoísta, los dioses observaban la arena con atención. Amaterasu, la diosa del sol, miraba a Inti con una expresión de desagrado. La forma en que había tratado a su hermano, Amaru, no le agradaba en absoluto.
Amaterasu: (con voz firme) Inti, has demostrado una falta de compasión impresionante con tu propio hermano. No es de extrañar que Amaru haya decidido unirse a la humanidad.
Inti: (respondiendo con frialdad) Hice lo que creí necesario. La debilidad no tiene lugar en nuestro panteón.
Amaterasu: (con desdén) La compasión no es debilidad, Inti. Deberías aprender de tus errores antes de perder más de los tuyos.
Susanoo, el dios de las tormentas y hermano de Amaterasu, estaba cerca, preparado para su próximo combate. Al escuchar la conversación, se acercó a Amaterasu.
Susanoo: (interviniendo) Hermana, no vale la pena discutir con él ahora. Tenemos una pelea que ganar. Okita Souji está listo.
Amaterasu: (asintiendo) Centrémonos en la batalla que tenemos por delante.
Mientras tanto, en la arena, Heimdall se preparaba para anunciar la siguiente ronda. El público estaba expectante, sabiendo que se avecinaba otro enfrentamiento épico.
Heimdall: (con voz potente) ¡Damas y caballeros, prepárense para la próxima ronda! ¡Del lado de los dioses, el invencible Susanoo No Mikoto!
Susanoo dio un paso adelante, su presencia imponente y su espada legendaria brillando bajo las luces del estadio.
Heimdall: (continuando) ¡Y del lado de la humanidad, el maestro espadachín, Okita Souji!
Okita Souji hizo su entrada, moviéndose con gracia y determinación. Su katana, afilada y reluciente, estaba lista para la batalla.
Susanoo: (mirando a Okita) Veamos si tienes lo que se necesita para enfrentarte a un dios.
Okita Souji: (con una sonrisa desafiante) No subestimes a un guerrero humano. He enfrentado muchas batallas y no tengo intención de perder hoy.
La batalla comenzó con una intensidad impresionante. Susanoo atacó primero, desatando una tormenta de cortes rápidos con su espada. Okita Souji respondió con agilidad, esquivando los ataques y contraatacando con precisión.
Amaterasu: (observando desde el panteón) Susanoo tiene una gran ventaja, pero no debemos subestimar la habilidad de Okita. La humanidad ha demostrado ser increíblemente resistente.
Inti: (murmurando) Tal vez, pero los dioses siempre prevalecen.
La lucha continuó, con ambos combatientes mostrando una increíble destreza. Cada movimiento era calculado, cada golpe era preciso. El público estaba al borde de sus asientos, observando cada instante con atención.
En las gradas, Buda se encontraba junto a Amaru, tratando de calmarlo mientras observaban la intensa batalla en la arena. Amaru, aún nervioso por la reciente confrontación con Inti, comía makis para intentar relajarse.
Buda: (con una sonrisa serena) Amaru, no debes temer a los dioses mayores. Recuerda, tu valor y compasión son lo que realmente importa. Has tomado una decisión valiente al unirte a la humanidad.
Amaru: (suspirando) Sé que tienes razón, Buda. Pero la presión es inmensa. No quiero defraudar a nadie, y menos a mi propio panteón.
Buda: (tomando un maki y comiéndolo) Todos enfrentamos momentos de duda, incluso los dioses. Lo importante es seguir adelante y creer en ti mismo. La humanidad y los dioses tienen mucho que aprender unos de otros.
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SHUUMATSU NO VALKYRIE x MAJO TAISEN
FanfictionEn un mundo donde la humanidad se enfrenta a la ira de los dioses, una alianza inesperada surge para desafiar el destino predeterminado. Brunhilde, líder de las Valkirias, propone el Ragnarok durante el Walpurgis como la última esperanza para detene...