𝗥𝗲𝘀𝗶𝗹𝗶𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮 || 𝙻𝚎𝚟𝚒 𝙰𝚌𝚔𝚎𝚛𝚖𝚊𝚗

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CAPITULO 21:

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Curiosidad

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 Erwin Smith se caracterizaba por ser un hombre serio, recto y sumamente inteligente, por lo que a lo largo de su vida se ganó tantos enemigos como amigos, por lo que una persona más no llegaba a importarle demasiado. Pero... lo que sí le interesaba eran las motivaciones para tales actos.

 Es decir, a Erwin no le sorprendió el hecho de que una persona quiera matarlo, lo que más le intrigaba era como era capaz de querer seguir haciéndolo. Asha Bram tenía heridas bastante graves, inclusive una que no dejaba de sangrar, pero ella seguía motivada en rajarle el cuello a pesar de eso.

 ¿Por qué? ¿Cuál era la motivación de ella para no caer desmayada antes de si quiera pensar en atacarlo? Hizo falta que su mejor soldado la retenga y tuvieron que darle un golpe para que la chica se calmase.

 El rubio sabía un poco de la historia de la castaña, información brindada gracias a su amigo y soldado Levi, pero por lo que sabía no llegaba a comprenderla. Él sentía curiosidad, una curiosidad tan grande que lograba alejarlo de sus obligaciones por momentos hasta que se obligaba a sí mismo a mantenerse concentrado. Su curiosidad aumentaba al ver que el Soldado más Fuerte de la Humanidad parecía estar en todo momento con su cabeza en la celda a la que llevaron a la chica, protegiendo con recelo una bolsa de la cual nadie sabía su contenido, ni siquiera él.

 Erwin Smith tenía un plan, y vaya que era uno bueno.

 Sabía de buena mano que las habilidades de Asha Bram eran superiores al de la mayoría de soldados de los cuales estaban bajo su mando, por lo que desperdiciar su potencial le parecía increíblemente estúpido y sin sentido. Fue por eso que decidió encerrarla, porque perfectamente pudo haber manipulado las cosas para que la chica pueda estar libre, y tanto que podía, pero eso a él no le servía en lo absoluto.

 Si, pensaba aplicarle la misma que hizo con Levi hace unos años, estando ella encerrada y con un posible juicio poco favorecedor planificándose, no era como que si se pudiera negar a su oferta. 

 Él vió algo en ella, ese espíritu de pelea que lo había visto en muy pocas personas, por lo que sabía, e inclusive pondría las manos al fuego, que ella no iba a negarse por muy mala que sea su opinión sobre él, por lo que ya estaba decidido. 

 Erwin Smith siempre tiene un plan, sobre todo cuando se trata de pavimentar el camino hacia su sueño.

 A vísperas de la coronación de la nueva reina, Erwin pidió permiso para poder ir a visitar a la fémina, pero antes decidió hacer una reunión con las personas que más confianza tenía y que más la conocían.

— ¿Qué?— preguntó Levi con evidente enfado.

— ¡Vamos a tener a Asha de vuelta, sii!— gritó la castaña de lentes emocionada— ¡No puedo esperar para verla!

— Oi, oi, oi, espera. ¿Por qué quieres que se una al ejército?

 Erwin ya esperaba dicha rección del pelinegro de baja estatura, por lo que no le sorprendió en lo absoluto, es más, ya tenía hasta su respuesta planificada.

— Como tu dijiste, Levi, Asha Bram es una chica con habilidades especiales que pueden ser fácilmente comparables con algunos veteranos de la Legión y con la expedición a Shingashina a la vuelta de la esquina, vamos a necesitar la mayor cantidad de soldados experimentados como sea posible. Quizás una persona como ella pueda hacer la diferencia.