Sinequeo

§7§

31 de diciembre último día del año, era la única fecha donde primero, se podía consumir cierta cantidad de alcohol únicamente cerveza,segundo, nos podíamos quedar en las calles indefinidamente.

Y tercero todos nos juntábamos en el parque central, pues este tenía un gran reloj en el centro, nos juntamos ahí para darle la bienvenida al año nuevo.

Yo estaba junto a mis padres, los cuales estaban tomándose de las manos mientras caminábamos.

Hace ya mucho que, desde noviembre que había nevado,pero ahora ya había cubierto los árboles, y algunos bancos para sentarse.

Hoy era como una pequeña feria, donde habían algunos juegos, que si de tirar una pelota a una pila de vasos, o tratar de que un aro entre en el pico de una botella.

Claramente, habían capuchas blancas caminando a nuestros alrededores, asegurándose de que todo estuviera bien.

Me entretuve, jugando algunas cosas,y comiendo todo lo que se me antojara, está fecha me gustaba, me hacía sentir bien.

Y entonces, Faltaron 5 Minutos para las 12 y empezamos a hacercarnos al centro, dónde el reloj daba la hora exacta.

Muchos se emocionan por el año nuevo, mi padre se lo tomaba con calma, mi madre se veía muy emocionada, yo estaba empezando a cansarme del calor de la gente.

O de que me empujarán.

Estuvimos esperando un rato, mientras esperábamos para la cuenta regresiva.

Diez,nueve, ocho

Empezaron a gritar todos con emoción

Siete, Seis

Era como un coro, yo solo observaba a mis padres feliz

Cinco,Cuatro,Tres.

Era como si esa cuenta regresiva iniciará como un temblor en el pecho, como algo que fuera a explotar.

Dos,Uno

Y se escuchó en coro como todos gritaron al único. "feliz año nuevo" y todos se volvieron una masa de abrazos y besos, incluso a los que no se conocían.

Yo por necesidad, trate de salir del centro de sudor y abrazos -no me pude escapar de algunos- hasta que salí y me aleje de la población buscando inconscientemente, mi lugar.

Estaba casi solo,pues todos estaban en el centro del parque, me recosté de un árbol y solté un suspiro, que dejo escapar una bolita de vapor.

Cerré los ojos, recostada del árbol y disfrute del relativo silencio que se formó en mi soledad.

-Alessa.

Me estremecí, esa voz ronca, abrí los ojos y lo ví, frente a mi, sus ojos azules me observaban, de arriba a abajo.

-chico de ojos azules-conteste, por alguna razón, me sentí menos nerviosa.

-si supongo que es injusto para ti que no sepas mi nombre-dijo y puso una mano al lado de mi cabeza.

-y supongo que no me lo diras-dije yo y lo esquivé por el otro lado dando la vuelta al árbol.

-no, ya es mucho que escuches mi voz, Alessa-dijo el siguiéndome.

-Por que me sigues tanto?-dije mirándolo con una ceja alzada  mientras me adetraba un poco más al bosque.

-Ni siquiera yo lo se-contesto en un susurro y note que si ceño se frunció.

-y si dejas de hacerlo?-

-y si no?

-que quieres ganar?.