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"no resisto estar metida en esta mierda de vida"

Estábamos al tercer día de luto,el "suicidio" de la señora jenkins nos había afectado a todos, a mi más que a nadie pues supe muy claramente que suicidio no había sido.

Nunca me había retractado tanto de haberle deseado la muerte a alguien, bueno, era la primera vez que le deseaba algo tan negativo a alguien.

Salgo dentro de mi sabía que había Sido el lobo, aquel hombre  que me deja notas en la ventana,el capucha blanca de ojos azules.

También tenía un corte de golpe,Malcolm, era el único al le exprese abiertamente que quería a esa mujer muerta.

Malcolm y el chico de ojos azules  tenían algo en común? Se conocían entre así? Eso me asustó de verdad.

Acaso se podía confiar en alguien?

-Hija-observe a mi madre, estábamos en el mercado-estas bien?

Yo la miro y asiento, hacercandome a ella y empezando a guardar ciertas cosas la escucho a tararear suavemente.

Observo mi celular de vez en esperando algún tipo de mensaje, de lo que sea pero nada.
.suspiro con pesadez y continuo con mi madre haciendo la compra.

Llegando a casa ya eran las 8 de la noche, mamá dijo que papá llegaría tarde por cuestiones del trabajo ella tenía mucho sueño y yo honestamente no tuve ganas de cenar.

Eso sí, le puse comida a Riku, que ya era lo suficientemente grande para poder comer su gatarina, el cual devoraba con gusto.

Observé mis platas notando que estaban un poco caídas, entre tanto movimiento y pasar todo el día en cama, se me olvidó regarlas.

Tome la regadera, y asi camina a la cocina, para llenarla con agua potable.

Me mordió el labio, mientras llenaba la regadera,Riku,que parecía crecer con los días, ronroneaba entre mis piernas.

Ese hombre...había matado por mi, era un mero capricho, algo estúpido, de esos pensamientos ontrusivos que te arrepientes de decir después.

Y el lo cumplió, no solo lo cumplió, lo hizo de tal manera que no pareció un suicidio.

Me dieron ganas al principio de ir con un capucha y contarlo, pero cuando me limpie la boca y tome mi celular denuevo, el ya había borrado la imagen.

Cerré el grifo y tomé la regadera, desde que eso ocurrió, cerré la ventana, necesitaba pensar no le tenía miedo a que me hiciera algo-honestamente no le tenía miedo- pero necesitaba dormir unos días sin pensar que el me observa.

Subí a mi habitación y abrí mi ventana, regando las plantas que estaban ahí, lego me di la vuelta y empeze a regar las otras que estaban ahí.

Y justo estaba regando la trinitaria que estaba junto a mi puerta, cuando noto que Riku se baja de la cama con un maullido y se va en dirección contraria a mi.

Eso me preocupo y alze la mirada dándome la vuelta para ver qué había llamado la atención de Riku.

Y ahí estaba el,con suéter y pantalones grises y aquel jodido tapabocas negro, sus ojos azules me observaban de arriba a abajo.

Yo por alguna razón, no me asusté, tampoco grite,solo deje la regadera en la mesita de noche y nos miramos, el uno al otro en completo silencio.

Yo sentía que el me escaneaba de arriba a abajo y entonces, sus ojos azules se oscurecieron levemente.

"Cómo si te quisiera comer"

Fue la frase que se me pasó por la mente en ese momento.

Me observé a mi misma y me di cuenta que tenía unos shorts de algodón cortos y un suéter verde que me tapaba lo suficiente, aunque me sintiera desnuda ante su mirada.

SinequeoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora