—¿Dónde estarán Shin y _____? —preguntó Supana, cruzando los brazos y mirando alrededor.
—No lo sé, pero lo que vimos en el casillero... —comenzó Kokuma, sin terminar la frase.
—¿Qué vieron en el casillero? —preguntó Chojo, levantando una ceja.
—Sí, cuéntenos, ¿qué pasó? —insistió Oka, quien acababa de unirse a la conversación, notando el nerviosismo en los demás.
Antes de que pudieran responder, Shin y yo aparecimos caminando hacia ellos, tratando de mantener la compostura. Shin se veía tranquilo, aunque aún ligeramente sonrojado, mientras que yo intentaba no hacer contacto visual directo con los demás, manteniendo una sonrisa despreocupada.
—¡Ah, ahí están! —exclamó Daku, tratando de disimular su sorpresa.
—¿Dónde estaban? —preguntó Oka, con una mirada de ligera sospecha.
—Estábamos explorando un poco el laberinto antes de venir aquí —respondió Shin con una sonrisa tranquila—. Lo siento por la tardanza, ¿vamos a comer?
—Sí, es hora de ir a comer, escuche que el club de cocina preparo un festín para los estudiantes y los invitados —respondió Supana.
Todos reunidos, nos dirigimos hacia la zona de comida. La atmósfera estaba impregnada del delicioso aroma de los platillos preparados por el club de cocina. Habían montado una serie de puestos, cada uno ofreciendo una variedad de comidas, desde sushi y ramen hasta pasteles y bocadillos.
—Esto huele increíble —dijo Supana, su expresión mostrando una mezcla de asombro y hambre.
—Definitivamente, el club de cocina se ha superado este año —añadió Daku, ya con los ojos puestos en una fuente de sushi.
—¡Vamos a probarlo todo! —exclamó Kokuma, con entusiasmo.
Nos acercamos a los puestos, y pronto nos encontramos rodeados de estudiantes y visitantes que también disfrutaban de la comida. Shin y yo intercambiamos miradas antes de tomar cada uno una bandeja y comenzar a llenarlas con diferentes platillos. A medida que íbamos probando las delicias, el ambiente se llenaba de risas y conversaciones animadas.
—Todo está delicioso —comenté, saboreando un bocado de takoyaki.
—Sí, se nota que le han puesto mucho esfuerzo —respondió Shin, sonriendo mientras probaba un trozo de pastel.
De repente, una voz familiar llamó a Shin desde la multitud.
—¡Shin, cariño!— era la madre de Shin y su padre pero también estaban acompañados por...
—¿Mamá?— Pregunte al verla.
—Hola bonita, hola chicos —saludó mi madre, sonriendo ampliamente—. Sali temprano hoy del trabajo y me encontré con Aoi y su esposo y decidimos venir juntos al festival.
—Sí, tu madre nos comentó que saldría temprano del trabajo y pensamos que sería una buena idea venir a apoyarlos —dijo el padre de Shin, con una sonrisa orgullosa.
—Por cierto, pasamos por fuera el laberinto pero aun asi se nota que le han puesto mucho empeño —comentó la señora Aoi.
—Gracias, mamá...
—Ahora que estamos todos aquí por que no vamos a comer ¿Ustedes ya comieron?— pregunto mi madre.
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𝕬𝖒𝖔𝖗 𝕺𝖈𝖚𝖑𝖙𝖔 [Shin Higaku]
Roman d'amourʙɪᴇɴᴠᴇɴɪᴅᴀ ᴀ ᴀᴋᴀᴅᴇᴍɪ ʜɪɢʜ ꜱᴄʜᴏᴏʟ ¿ᴇʀᴇꜱ ɴᴜᴇᴠᴀ ᴠᴇʀᴅᴀᴅ? ¿ʏᴀ ᴄᴏɴꜱᴇɢᴜɪꜱᴛᴇ ᴜɴ ᴄʟᴜʙ ᴘᴀʀᴀ ᴜɴɪʀᴛᴇ?