𝚖𝚎𝚛𝚌𝚒𝚕𝚎𝚜𝚜𝚕𝚢(kingxdiane).

17

Estaba en un estado desconocido para ella, hacia ya un rato se había dado cuenta de que en algunos de los tal vez cientos de vasos de los que bebió alguien había metido extasis, pero no sabía exactamente qué cantidad, se sentía como en otra realidad, sentía su cara arder y otras partes de su cuerpo también, estaba borracho y drogada, no era ella misma, las ideas más estúpidas se cruzaban por su cabeza en ese momento, no estaba en condiciones para cometer estupideces.

Caminaba por la fiesta como un ente, pasaba por delante de la gente, algunos hombres intentaban Acercarse a ella pero parecía ser hasta tenebrosa su apariencia.

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King por otro lado ya le estaba costando mantenerse en pie, mientras su amigo estaba como si nada el estaba haciendo un esfuerzo increíble pata poder caminar, sus mejillas estaban rojas, su cara tenía una sonrisa tonta, seguía al tipo alto para todos lados que el fuera, hablaba con quien el hablaba, bebía lo que el bebía y así, solo se mantenía como su sombra.

En ese instante sintió una presencia que no le estaría gustando sentir, miro hacia atrás y vio entre las multitudes pasar una cabeza vendada, un caminar torpe o un cabello verde que lo espanto, ¿que hacia allí?, ¿fue a buscarlos?, ¿estaba armado?, ¿y si trajo a la policía con el?.

No lo pensó ni dos segundos, apenas vio esas ordes reconocerlo en lo lejos comenzó a correr, se le dificultaba con toda la gente pero ya había comenzado a empujarlos, debía esconderse, no debían saber que el estaba allí, no queria más problemas, solo quería que ese tipo la dejara por las buenas.

A pesar de que parecía inaccesible para la gente de la fiesta, subió al segundo piso, donde la música ya no se escuchaba tan fuerte y los gritos tampoco, no conocía la casa, menos sabía si había gente en ese piso, así que miro todas las puertas, las tanteo a todas y cada una hasta que noto que la única que estaba abierta era la de un enorme y amueblado baño, se metió y cerró la puerta detrás de él sin encender la luz.

Se sentó en un pequeño mueble que parecía un pequeño guardador de la altura de una silla, jadeaba, el alcohol no lo dejaba pensar con normalidad, su vista estaba perdida y no podía normalizar su respiración,

Sintió pasos serca de la puerta, estaba mirando a todos lados, no tenía el tiempo suficiente para esconderse en alguno de los armarios que adornaban aquel baño, así que solo se quedó mirando la puerta mientras jadeaba asustado.

Tomaron el pomo de la puerta, vio desde la tenue luz que entraba por debajo y los costados de la puerta una silueta, girando lentamente, parecía que supiera que estaba ahí y lo acechaba, hasta que luego de abrir la puerta la empujo un poco.

No sabia si seria peor el tipo al que Ban masacro o la figura que estaba viendo en ese momento, miro su rostro que se iluminaba con la luz de afuera, estaba roja, sus ojos que antes eran purpuras estaban negros, era su pupila que había tomado el poder, lo miraba como ciega.

No sabia que hacer, estaba ella parada frente a la puerta, mirandolo fijamente, el estaba sentado en un mueble intentando entender que era lo que pasaba, porque estaba ahí, ¿lo había seguido?, no se veía bien, aunque estando lejos podía sentir su perfume, se veía extraña, aunque no le quitaba para nada el atractivo.

Comenzó a caminar, se tambaleaba un poco, estaba desorientada pero estaba seguro que sabía perfectamente quién era el, lo que no sabía era lo que pasaría, tal vez lo insultaria o algo parecido, pero no parecía molesta.

Apenas estuvo lo suficientemente serca coloco sus manos a los costados de la madera del lugar donde estaba sentado, dejando su cara a sólo milímetros de la suya, tal vez por el susto retrocedió, trago saliva, estaba realmente perturbandolo, estaba recargada, mostrandole el escote de aquel vestido naranja, no era solo el tener su cara a milímetros sino también tener sus pechos casi tocandolo.

No sabia que hacer, no quería quitarla, pero si ella no emitía un sonido o daba un indicio del porque carajo lo había seguido se moriria de un infarto, solo suspiraba su aliento a bebida dulce sobre su cara, nisiquiera tenía alguna expresión en su rostro, solo esas megillas rojas y calientes.

Se tiro sobre el, y no era una exageración, se tiro estampando su boca contra la de el, comenzó a moverlos a una velocidad bastante ruda, parecía que quería comérselo, tal vez por reflejo el correspondió, pero no quitaba que siguiera asustado por qué alguien más llegara, estaban a obscuras en un baño donde no podían acceder, aún tenia miedo que Howzer se apareciera en el lugar.

Ella comenzó a besar su cuello, subió sus caderas sobre el, dejando sus piernas a ambos lados de su cuerpo, comenzó a mecerse mientras comenzaba a gemir, el contrario estaba intentando seguirle la corriente pero no estaba entendiendo que le pasaba, parecía despreciarlo o al menos pasar de él, y ahora la tenía encima, como una fiera, estaba moviéndose y su cuerpo no podía evitar responder a ese estímulo, quería cojersela, pero en ese lugar con ese tipo persiguiendolo no sabría que tan capaz sería, solo miraba la pequeña abertura que había dejado ella en la puerta, lo estaba volviendo loco el miedo de que ese tipo se apareciera y los viera así.

En el instante en que la castaña comenzó a masajear su ereccion escucharon una voz a lo lejos, ambos quedaron estáticos, la conocían, tal vez demasiado, el peor temor de King esa noche se hizo realidad, era aquel tipo maldiciendo por los pasillos del segundo piso.

_Carajo...¿donde se metió ese sujeto?...debo regresar a casa_.

Ella solo detuvo sus besos, seguía jadeando pero a pesar de la droga en su cuerpo entendía lo que esa voz significaba, se separo y miró al contrario con panico_Es el...

_Si..._.

_Hijo de puta...¿que carajos hace aqui?_.

_Dimelo tu_.

_¿que se supone que haremos?_.

El sabia lo que debía hacer, no quería seguir con eso en la cabeza, tal vez Ban era un imbecil pero el no, la quito de su cuerpo, se levantó y acomodo un poco su ropa_Tu nada...yo saldré a hablar con el, quédate aquí...si te ve serca de mi tendré más problemas de los que ya tengo_.

Ella solo se quedo ahí, mirandolo, no es como si pudiera hacer otra cosa en ese estado.

Camino hasta la puerta y la cerró detrás de él, dejándola dentro, miro para todos lados, el tonto estaba intentando mirar por la puerta del balcón por si el estaba ahí.

_Hey..._.

Respondió al llamado de King dándose la vuelta, apenas lo vio su semblante de intriga cambió a una tranquilo.

_Ah, ahí estas_.

_¿Que es lo que quieres?_.

El contrario solo camino hasta estar frente a él, apenas lo vio sólo pudo sentir pena, estaba con la cabeza vendada y al menos el setenta porciento de su rostro estaba tapado en moretones y suturas.

_¿Puedes hablar?_.

_Depende...¿porque mierda me estas buscando?_.

_Tranquilo viejo...yo...venia a disculparme_.