𝚖𝚎𝚛𝚌𝚒𝚕𝚎𝚜𝚜𝚕𝚢(kingxdiane).

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_Meliodas_continuo abrochando los botones hasta llegar al nacimiento de su cuello, acomodando los bordes lentamente_¿en que puedo ayudarlos?_.

_supongo que estas al tanto de los rumores sobre ti..._.

_¿que rumores?_.

_no jodas Fairy, ¿enserio no te dijeron nada?_el menor de los demons interfirió molesto.

_lo lamento, no se de que me hablan_.

_se dice que te cojiste a Danafor el fin de semana luego de la fiesta_.

Aquellas palabras por parte del peigris fueron un baldazo de agua fría para el castaño, ahora todo encajaba, ¿por que mas mencionarían su pene después de tirarle el café?, aquella detestable e intolerable mujer se había dado el lujo de hablar mentiras aun sabiendo que la llevo a su casa de completa buena fe.

_no quiero que pienses que es por que tuve una relación con ella en secundaria pero...esa mujer es un desastre, si realmente fornicaron ya toda el maldito edificio esta al tanto y Diane también_.

Hasta allí, aquello había arruinado directamente todo su plan, al diablo la venganza, al diablo todo, se sentía un imbécil, sentía que el mundo estaba intentando quitarlo de todo aquello de mil maneras distintas, alejarlo de aquella mujer cuanto antes. Miro al rubio el cual esperaba al menos una palabra de su parte, los ojos ámbar de quien estaba frente a el mantenía sus pupilas fijas, su rostro había palidecido casi al instante, comenzó a darle inquietud que lo mirara así, y después de unos segundos miedo, tenso las cejas y trago en seco_viejo, ¿estas bien?_.

_yo no toque a esa puta_.

Aquella palabra alarmo fuertemente a los tres, a pesar de que a veces no había otra para describir a Danafor, en ese momento  y por su mirada parecía completamente siniestro, si estaba diciendo o no la verdad era un misterio ya que esa reacción podía ser tanto de sorpresa por la mentira o de vergüenza por los hechos_te creemos, Liz suele ser asi..._.

Sin dejar terminar a Zeldris salió del vestidor casi corriendo, dejando a los tres con las emociones en la boca_algo me dice que hará algo estúpido...¡oye enano!, ¡tranquilo, te creemos!_.

~*~

La castaña golpeo el casillero de quien sabe quien, dejando una abolladura bastante evidente_¡estúpido imbécil!, ¡¿como se atreve a burlarse así de mi?!_

_tranquila Diane, no deberías tomarlo tan enserio...sabes como es Liz quizá es mentira_.

_¡me vale si es verdad o no Elisabeth!, ¡todos están hablando de eso!_.

_que todos lo digan no significa que sea real, relajate_la pelinegra intento tranquilizar a su amiga viéndola en un evidente ataque de ira_¿por que no nos tomamos el dia y vamos de compras o por un café?_.

_¡no quiero nada!, ¡quiero la cabeza de esa zorra en una canasta de picnic!_.

Algo alerto al grupo de tres, frente a ellas caminando pasaba uno de los protagonistas del drama que toda la universidad estaba siguiendo, nisiquiera freno a verla, y detrás de el sus amigos, Meliodas Zeldris y Ban intentando detenerlo.

_¿creen que debamos seguirlos?_pregunto Gelda al ver como estaban llamando la atención de todos en los pasillos.

La castaña sin decir nada comenzó a caminar lentamente a donde ella creía que estaban yendo, algo en ella le decía que no terminaría bien para nadie en ese lugar, las chicas la siguieron para asegurarse de que no interfiriera y por que bueno...es Diane.

~*~

Llego hasta el casillero donde aquella sínica mujer estaba hablando tranquilamente con una de sus amigas, el castaño encesto un manotazo en el que estaba frente al suyo, asustando a la pareja de mujeres, provocando que no solo ellas, todo el lugar se diera la vuelta para ver que sucedía.

La mujer vio como la miraba como si se tratara de un ser detestable y vomitivo, se notaba que estaba enojado y supuso de que se trataba, pero aun así quería agregarle mas picante al drama_¿King?_pregunto, fingiendo desentendimiento.

_¿te gusta decir estupideces sobre cosas que jamás ocurrieron?, ¿crees que es un premio para un hombre decir que se acostó contigo?_.

_¿de que hablas?_.

_¡¿de que hablo?!, ¡de que le dijiste a todo el maldito edificio que cojiste conmigo cuando lo único que hice fue llevarte a tu casa por que estabas sola en plena calle!, ¡te hice un puto favor y así es como me lo devuelves?!, ¡debí dejarte a tu suerte y que vieras como carajo regresabas sola!_.

_¡oye imbécil!, estas hablando con una mujer, te exijo respeto_.

_tranquila Jericho_despues de tranquilizar a su compañera volvió a mirar a su atacante, mirándolo con el mentón bien el alto_tienes agallas para venir a recriminar algo que yo no dije...y no, claro que no paso_.

El castaño miro  con odio aquel rostro sínico, miro a su alrededor, ahora las miradas sospechosas eran hacia ella, no el, no tenia mas nada que hacer allí, se sentía sofocado, sentía sus piernas relajarse, el piso ya no ardía, suspiro, miro la puerta de salida hacia la planta baja, paso rápidamente, obviándola, bajándolas casi corriendo.

Todos en aquel corredor miraban anonadados como había humillado y orillado a una de las celebridades mas detestadas de la institución a reconocer públicamente que los rumores que obviamente ella había inventado eran disueltos por su misma creadora. Mientras ella sentía por primera vez como habían pisoteado su rostro sin piedad, suspiro, dio una vuelta de llave en su casillero, la quito y camino a su salón con su amiga detrás.