Capítulo Diecinueve.

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Hyunjin:

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Hyunjin:

El gris también forma parte del paisaje.

No tengo duda de ello, el paisaje sigue luciendo intacto a pesar de que los colores cambian con la temporada, y que habrá alguien que se tome el tiempo de observar lo enorme que luce el cielo cubierto por nubes grises que se extienden por el horizonte.

—En estos tiempos es complicado, aunque la demanda aumenta, el personal es escaso. —Jía deja de ver por la ventana lo gris que ha decidido estar el día debido a la lluvia de anoche. —Y necesito realmente a esa persona.

—¿Y por qué no Hyunjin? —Nyal me señala desde la cocina con ese guante rojo para hornear.

Levanto los hombros para restarle interés al asunto. El plato de nueces queda vacío al meterme el último a la boca.

Realmente no estoy prestando atención a su tema de conversación en todo el rato que llevo en este lugar, ni siquiera estaría aquí de no ser porque últimamente no he sabido controlar mi habilidad para bloquear las voces del exterior que no quiero escuchar, pero que de alguna forma mis oídos captan, y de no ser por eso, yo no estaría despierto. El día es uno de esos grises y silenciosos, que huele a petricor y a café, pero también que se vuelven ruidosos para mí. Con tanto silencio, soy capaz de escuchar con claridad el susurro del viento que azota la ventana y escuchar el vibrador del celular de Nyal que tiene al otro lado de la mesa del gabinete. Tanto ruido fue el culpable de hacerme despertar.

No acostumbro a levantarme tan temprano pero tampoco tan tarde, esta mañana hubiese querido dormir más al no poder conciliar el sueño anoche por pensar en cómo sería la reacción de cierto chico si en una de sus clases a mi boca se le ocurre decir algo que no debe.

Como: "me gusta besarte", o; "dime que también te gusta, por favor"

Conectar con sus sueños es un sueño imposible. La forma en la que describe un sueño en una canción rosa es demasiado extraña, como decir, "por mis sueños podría enamorarme de él". Pienso en esa probabilidad, Felix es demasiado confuso de entender, pese a que algunas veces es demasiado fácil para mí saber lo que sucede, y otras, es difícil cuando lo tengo cerca, así como controlar mis impulsos de no querer besarlo todo el tiempo.

—¿Hyunjin? —Mi madre pasa sus manos frente a mí. Reacciono con un suspiro inconsciente. —Parece que alguien te tiene tan sumido, hijo, la única forma de callarnos es hablar contigo sobre eso que te gusta ¿no?

—Ah sí, ¿qué decían? —Nyal voltea los ojos con incredulidad y mi madre solo sonríe paciente.

—Que necesito a un modelo. —Vuelve a dar vueltas por toda la cocina, el tacón de sus zapatos hace ruido.

—¿Y qué tiene que ver eso conmigo?

—¡Qué tonto eres! —Suelta Nyal —¿Estás bien? ¿No estás enfermo? —Pone las manos en su mentón. Frunzo las cejas por su extraño comportamiento hacia mí. —Tú eras más inteligente la semana pasada.

OMEGA NEGADO © #HyunlixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora