Especial Navidad | KaiSoo | ChanBaek | SeHo | ChanKai | ChenMin

Capítulo 3

SeHun

Dos semanas más tarde

Me encontraba bajo el resplandor de las tenues luces rojas y verdes, como un pez fuera del agua en un mar de gente, en el que todas las personas me parecían ridículas. La fiesta no me interesaba lo más mínimo, pero uno de mis mejores clientes me había invitado y me sentí en la obligación de acudir. Mi plan era dejarme ver durante una hora y, después, desaparecer.

Mi problema no tenía tanto que ver con el ambiente en sí, sino con el hecho de que era una fiesta navideña de disfraces, lo que no me iba en absoluto. ¿Quién demonios celebra una fiesta de disfraces en diciembre? Tuve que buscar algo de última hora y no estaba demasiado contento con el resultado. Al parecer, en la tienda solo había dos disfraces lo suficientemente grandes para mí y, dado que lo había dejado para el ultimísimo momento, no había tenido tiempo de buscar en otra tienda.

Tras apurar el segundo Jingle Juice Spiked Punch, la noche se volvió más prometedora.

Al menos hasta que lo vi.

Y estaba claro que él ya me había visto, puesto que me fulminaba con la mirada.

¿Qué diablos hacía aquí?

JunMyeon.

Kim JunMyeon.

El futuro exesposo de Choi MinHo, mi cliente.

Estaba guapísimo. Su cabello rubio tenía un tono degradado: más oscuro en la raíz y rubio platino en las puntas. Era el hombre con el que había fantaseado durante días antes de saber quién era en realidad.

¿Cómo se había librado de ponerse un disfraz? Ojalá no hubiera sido tan estúpido para creer que era completamente necesario ponerse uno. J p noeyMnuarecía una persona normal mientras que yo me agazapaba allí, tratando de conservar los últimos retazos de mi dignidad vestido de Buddy el Elfo.

Se suponía que no tenía que volver a verla hasta el próximo juicio. Aún no había asumido que JunMyeon, el chico de la cafetería, fuera Kim JunMyeon.

Miré hacia la puerta. Era demasiado tarde para escabullirse, ya me había visto. Un segundo después, la tenía delante.

—Vaya, vaya, pero si es el Bandido Besucón... Oh SeHun. Y no eres precisamente un santo, que yo sepa. Más bien un diablo. ¿Qué haces aquí?

—Es la fiesta de un cliente. Me han invitado. Aunque me parece que una fiesta navideña de disfraces es una idea bastante horrible.

—Gracias. Fue idea mía. Yo he organizado esta fiesta.

Mierda. Había olvidado que era organizadora de eventos. Eso explicaba por qué estaba allí y por qué no llevaba un traje ridículo.

Me fulminó con la mirada.

—Entonces, ¿Park ChanYeol es cliente tuyo? Yo también trabajo con él. ¿Sabe lo retorcido que eres? ¿Que no tienes corazón?

Apreté el vaso.

—¿Perdona?

—Vas a por el dinero de mi abuela. Los ahorros de una mujer de ochenta años que tiene que pagar su atención médica. Debería darte vergüenza. Si eres tan buen detective, podrías hacer algo útil y centrarte en el dinero que MinHome robó a mí. Fui un idiota al creer que el balance de mis acciones se había desplomado tanto el año pasado.

—Este no es el momento ni el lugar para discutir sobre el caso. No tengo por costumbre discutir asuntos legales vestido de Buddy el Elfo.

—¿En serio? Pues yo creo que este disfraz estúpido te sienta de maravilla. Y tiene sentido que MinHo encontrara a un abogado tan sucio como él.