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Los chicos llegaron a la sala que ya están organizada para iniciar la fiesta. Fueron aplaudidos y festejados.

Tiempo después Rose estaba aburrida, los chicos la veían de lejos pero ella prefería estar sola. Pues así los chicos podían hacer algo más.

Rose estaba en un balcón de podría decir pero era cubierto por una capa de agua, todo era magia. La sala al estar en las mazmorras, estaba en el lago negro.

No hacía nada. Entonces Rose salió y le dijo a sus amigos que ya se iría a dormir y los chicos se despidieron de ella.

Rose caminaba por el pasillo hacia su habitación, con la mirada para abajo. Ella chocó con un cuerpo y rápidamente reconoció que era Draco por su aroma.

— Lo siento— dijo Rose levantando la mirada y esperando que no haya alguna discusión.

— Cállate, sangre sucia— Draco rápidamente unió sus labios a los de Rose.

Rose sorprendida siguió el beso. Ya se estaba calentando. Era un beso rudo por lo cual Rose soltaba alguno que otro gruñido.

Las manos de ella chica rodearon el cuello del chico y las manos del chico fueron hacia los glúteos de la chica y agarrándolos fuertemente para cargar a la chica.

Rose comprendió y rodó sus piernas alrededor del trozo de Draco.

— ¿Así que las copia Weasley te quieren coger, no?— pregunto mientras Draco caminaba haci su habitación entre besos.

— ¿De... que hablas?— dijo sin querer cortar el beso.

— ¿Me vas a decir que no viste como te saboreaban en la fiesta?— preguntó molesto.

— No lo vi—

Los dos entraron a la habitación de Draco y el cerró la puerta, Draco la colocó en su escritorio.

— ¿No?— preguntó el agarrando la barbilla de la chica y abriendo su boca.

Rose negó con su cabeza.

— ¿Me veías?— preguntó Rose con dificultad por el agarre de Draco.

— ¿Te aburrió la fiesta? ¿Quieres que te folle duro?— hablo.

Rose asintió. Draco desabrochó su cinturón y soltó sus pantalones.

Su bulto estaba grande, subió el vestido de Rose hasta su cintura.

— ¿Ya se mojó la sangre sucia? ¿Tan necesitada estás?— pregunto y bajo sus boxers.

Su miembro salió parado y estaba bombeando de la necesidad. Rose se movió para adelante inconscientemente pero Draco la detuvo.

— Te ocupo— dijo Rose. Rápidamente el chico bajo las bragas de Rose e introdujo su miembro profundamente en ella.

Fue tan repentino para Rose que soltó un alto gemido.

— Malfoy...— gimió ella.

— ¿Te gusta?— dijo el moviéndose más rápido y entrando más fuerte.

Rose asintió mientras soltaba gemidos. El colocó sus manos en su caderas y después una mano la subió a hacia la altura del rostro de Rose.

— Abre— ordenó y Rose abrió la boca. Draco metió dos dedos a la boca de Rose.— Chupa—
Rose comenzó a chupar como si fuera el miembro de Draco.

— Buena chica— dijo el mientras gruñía.

Las embestidas Draco eran cada vez más fuertes y Rose ya sentía cómo se iba a correr.

Don't Even Think About ItDonde viven las historias. Descúbrelo ahora