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Por fin Rose volvía. Encontró a sus papás en la estación y se despidió de ellos, después unió al tren emocionada por ver a sus amigos. Pues desde la carta de Enzo no recibió otra y realmente los extrañaba.

Trataba de ignorar el hecho de que tendría que engañarlos, sácheles us secretos y revelarlos cruelmente frente a otra gente.

Por su mente ya había pasado la idea de alejarse de ellos y poner de excusa que ya no se llevaban.

Entró al tren y camino rápido buscando en cada vagón, hasta que los encontró en las mesas. Todos los años se habían ido por cajón pero no le molestaba que fuera en las mesas.

— ¡Chicos!— gritó Rose emociones y todos voltearon y fueron a abrazarla, menos Tom. El solo saludo desde lejos.

Después de tanto abrazo Rose notó que los chicos llevaban ojeras en sus ojos. Se veían cansados o estresados, incluso no hicieron tanta fiesta al reencontrase.

Pansy está sentada con Draco, Blaise y Theo. Y Rose está con Matt, Tom, Enzo y Reg, Rose del lado de la ventana.

— ¿Cómo estás?— pregunto Rose.

— ¿Bien, tú?— pregunto Enzo mostrando una sonrisa.— ¿Qué tal estos días con los Weasley?—

— ¿Con los Weasley?— Tom puso cara de asco.

— Si, creí que les dije por carta— hablo Rose.

— Estos días no me llego ninguna carta tuya... te deje de escribir uno que otro día— hablo Matt.

— No llego ninguna carta, seguro se quedaron en mi casa. Igual mis cartas— hablo Rose confundida.

— ¿Fuiste bien recibida en la madriguera?— pregunto Reg burlón por el nombre.

Rose rodó los ojos con solo recordar.

— Solo Ginny me trato bien. De hecho me cayó muy bien, es muy linda, espero que podamos seguir hablando. Molly y los demás son un dolor de cabeza— dijo Rose y ellos rieron.

— ¿No te hablaron mal? Los clones, tu hermana, el zanahoria, Potter— pregunto Matt.

Rose negó con la cabeza.— Pues no hablamos—

— Mínimo, si no con gusto les podíamos dar una buena paliza— hablo Matt sonriendo.

— Que bueno volver a verlos, ¿ustedes, que hicieron estos días?— pregunto Rose y no hubo respuesta hasta un poco después.

— Realmente nada, la mansión Malfoy siempre está callada— dijo Enzo.

Ahí Rose recordó cuando escuchó a Harry llorando mientras hablaba con Hermione y Ron. Sirius Black había sido asesinado, el padre de Reg.

Cómo Reg nunca hablo de su papá, Rose no se dio cuenta hasta ese momento.

— Reg...— habló Rose y Reg alzó la mirada para escuchar.

— ¿Si?—

— Y... de Sirius Black... ¿cómo te sientes?— pregunto Rose.

— Lo único que los hace mi padre es la sangre. Su tiempo fuera de Azkaban lo uso para Harry, ni una vez me fue a ver. Pero no me importa, entonces no lamento su muerto— hablo Reg serio.

Rose sentía que no lo decía enserio pero no le iba a insistir.— Esta bien, cualquier cosas estamos aquí para ti—

Regulus le sonrió.— Gracias, linda—

El tren avanzó y unos momentos después algo explotó porque había humo en donde los chicos se encontraban. Rápidamente los seis se pararon preocupados y viendo que ocurrió. Igual Draco se levanto.

— Seguro fue una broma de uno de primer año, tranquilos— hablo Rose. Y los chicos se sentaron pero alertados.

En el camino Rose se quedó dormida en el hombro de Matt.

— No hablen— dijo Matt al ver a Draco por lo cual los chicos entendieron la referencia.—... porque Rose está dormida— completo.

Al llegar a la estación Matt despertó a Rose.

— Ya llegamos, preciosa— hablo Matt acomodando el cabello de Rose mientras ella abría los ojos. Luego beso su frente.

— Vamos— hablo Reg mientras iban saliendo.

— ¿No vas, Draco?— preguntó Pansy.

— Ahorita voy. Los alcanzó— habló Draco lo cual se le hizo curioso a Rose, cualquier cosa le servirá.

Los chicos salieron y después Ros fingió que olvidó algo y regreso al tren.

Abrió la puerta lentamente, con miedo. Draco volteó rápidamente y al verla sonrió atrevido.

— Granger, ¿tan necesitada?— preguntó Draco.

Rose no esperaba eso pero asintió.

— Entonces quédate ahí— ordenó y Rose no se movió.

— ¿Qué haces aquí?— preguntó Rose en voz baja.

— No tengo que darte explicaciones— dijo el.

— Bi- — Rose fue interrumpida por un beso de Draco.

Ella lo siguió rápidamente, colocó sus manos tocando su pecho y el acariciaba su culo, después lo apretó haciendo que Rose suelte un gemido.

— Sin ruido— ordenó Draco y Rose solo cerró lo ojos mientras seguía el beso.

Después se escuchó como alguien abría la puerta entonces Draco agarró su maleta, abrió la puerta y llevaba su mano en la cintura de Rose. Salieron y los chicos rieron.

Rose se arregló el cabello y su ropa, igual Draco.

Llegaron a los carruajes donde los chicos esperaban a Rose, incluyendo a Pansy.

— ¿Lo encontraste?— pregunto Theo.

— Me acorde que lo dejé en mi maleta— hablo Rose y rio al igual que los chicos.

— ¿Ya Draco, nos vamos?— pregunto Pansy molesta al ver que Draco llego con Rose.

— Si— hablo Rose y subieron al carruaje como se habían ido en el tren.

— Este será un año de mierda— hablo Matt.

— Tienes razón, me tiraré dela torre de astronomía— dijo Enzo.

— Será tranquilo, no creo que dejen más tarea— hablo Rose y los chicos asintieron.

— Puede ser— hablo Reg.

Don't Even Think About ItDonde viven las historias. Descúbrelo ahora