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POV

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POV. Jung Hoseok.

— ¡Buenos días, dormilón!

El grito de Jimin resonó en toda la habitación, tome la almohada y la puse sobre mi cara, aplastándola con fuerza.

— Vamos Hobi, tienes que despertar. — me exige al mismo tiempo que me quita la almohada y la lanza a la esquina de la cama. — No querrás que lleguemos tarde a nuestro primer día, ¿O sí?

— Solo cinco minutos más, por favor. — pido aún soñoliento.

— No señorito.

Frunci el ceño. — Está bien, está bien. — me resignó, realmente quería esos cinco minutos.

— Alístate, prepararé el desayuno. — me dice y luego sale de mi habitación con una enorme sonrisa en sus gruesos labios.

Park Jimin, es Omega al igual que yo, nos conocimos en el primer semestre de la universidad, ambos estudiamos  Relaciones Comerciales y mercadotecnia, desde entonces hemos sido inseparables. Jimin es un gran amigo, me ha ayudado muchísimo, estuvo a mi lado en los peores momentos, como cuando descubrí que el imbécil de Soobin me era infiel, si, eso fue un golpe muy fuerte para mí. Soobin y yo teníamos un poco más de un año de relación, y un día después de mi turno de trabajo, quise hacerle una sorpresa y fui hasta su departamento tenía un juego de llaves que él mismo me dió, así que entre y fue cuando lo ví, estaba teniendo sexo con una chica Omega, es tonto pensar que mi cuerpo solo reaccionó para llorar como un idiota, pero asi fue, cuando le pregunté el por qué me hacia eso él me respondió que era mi culpa, que simplemente dejo de gustar de mí y que quería terminarme desde hace mucho.

Salí de ese departamento con el corazón hecho añicos, fue horrible, mi lobo se entristeció al igual que yo. Esa noche Jimin me convenció de ir a un bar para distraernos y olvidar al imbécil de mi exnovio. Acepte porque realmente no quería sentirme tan miserable, todo paso muy rápido, de un momento a otro el alcohol se había apoderado de mi y sin saber cómo carajos, termine besándome con un Alfa que estaba allí, creo que fui yo quien lo inició, los recuerdos son totalmente ambiguos, son pequeñas lagunas en mi mente, lo que sé es que ese Alfa me marco pero para cuando me di cuenta yo ya había huido.

Han pasado dos años y medio desde entonces, mi lobo reconoció al hombre como mi Alfa pero, yo no tengo ni puta idea de quién es ese hombre, ¿Intenté buscarlo? No, la verdad es que no lo hice, estaba tan avergonzado y aterrado que no me atreví a buscar a "mi Alfa" y tal parece que él tampoco me busco.
No fue tan malo, la marca me protegió de Alfas que querían pasarse de listos, gracias a ella no he tenido preocupaciones de mis fermonas, funciona como un repelente y eso me encanta, claro que cuando mi celo llega es un completo infierno, la necesidad del Alfa me consume hasta los huesos, hubieron momentos en los que los supresores no eran suficientes, así que solo podía llorar de agonía por el vacío en mi interior.

Pero ahora vivo con mi mejor amigo, Park Jimin, decidimos mudarnos juntos unos meses antes de graduarnos, la compañía mutua nos ha hecho bien a ambos.

El Favorito Del Señor Min [SOPE]. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora