57

2.6K 367 92
                                    

La mujer mantenía la mirada fija en mí, entonces le dijo algo a Irene y luego volvió su vista a mí.

— Si quieres podemos irnos a otro lugar — me propuso Jungkook.

— No, está bien. — fue lo único que pude responderle antes de que la señora Min terminará por acercarse a nosotros.

— Querido, ¿Estás disfrutando la noche? — pregunto con un toqué de burla.

Asentí con una sonrisa fugaz.

— Mi hija Irene, fue quien preparó todo, desde la decoración hasta los banquetes y el licor — agregó la señora Choi.

— Su esfuerzo es notable — comenté — la noche es agradable y el ambiente es acordé a la esencia de la empresa. Mis felicitaciones por su arduo trabajo señorita Choi. — dije con sinceridad, pero sin bajar mi guardia.

Tanto mi lobo como yo estamos en alerta.

— Gracias, joven Jung. — ella sonrió apenas.

— ¡Oh, por mi Diosa! Creo que no los he presentado — dijo la señora Min con malicia. — Hoseok ella es-

— No tiene que — la interrumpí — la señorita Irene y yo tuvimos el placer de conocernos en una oportunidad — mis ojos se engancharon en la Omega frente a mí — aunque desafortunadamente nuestra conversación fue... — sonreí — corta. 

Mis palabras crearon una tensión en el ambiente, Jin y Jungkook se mantenían en silencio sin despegarse de mí, por otro lado la señora Choi me fulminaba con la mirada mientras su hija arrugaba el entrecejo, quizás recordando lo que le dije aquella vez.

— Es asi... — La señora Choi ladeó su cabeza —  ¿Hoseok, no? Eres realmente lindo aunque tu aroma es muy suave, casi escaso.

Eso fue una provocación demasiado obvia.

— Sería una falta de respeto para los presentes si deliberadamente esparciéramos nuestras feromonas por el lugar — intervino Jungkook — eso sería vulgar.

— Estoy totalmente de acuerdo contigo Kook. — la señora Min dió un sorbo al licor de su copa.

Irene parecía indecisa entre hablar o no, sus ojos se fijaban en los míos y luego en los de Jungkook... Hasta que por fin decidió hacerlo.

— Es grandioso ver que sean amigos — comentó de manera ambigua. — eso significa que lidias muy bien con los rumores.

Los rumores... Esos en los que se dice que Jungkook es el Omega de Yoongi.

Si, eso creo una fuerte inseguridad en mí.

Pero...

Eso cambió, ya no la hay.

Ladeé mi cabeza y giré hacia Jungkook, el me miró confundido.

— No puedo culparlos, mi amigo es realmente hermoso.

Él sonrió.

La pequeña risita de Jin hizo que yo también sonriera.

Pero los ojos de las Omegas adultas cambiaron por completo.

La señora Choi arrugo el entrecejo y hablo.

— Eres bastante descarado.

Podía sentirse nuevamente la tensión,

— Supongo que la conversación ya no es grata para ustedes, — solté con brusquedad y sin rodeos.

No podía ceder ante la presión, mantuve mi postura decidido.

El Favorito Del Señor Min [SOPE]. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora