El Favorito Del Señor Min [SOPE].

33

Llame a Jimin para encontrarnos en el centro comercial, la verdad es que no se nada de la moda o esas cosas, mi familia era de pocos recursos y lo que lograba obtener de mis trabajos de medio tiempo lo usaba para mis gastos universitarios; no tengo ni idea por dónde debería comenzar.

Frederick ya estaba estacionado frente a mi departamento esperándome.

— Buenos días señor Jung.

— Buenos días Frederick. — subí al auto.

Siento que me estoy acostumbrando a esto.

Llegamos al centro comercial, ví a Jimin esperándome justo en frente de una tienda de zapatos.

— ¡¡Hobi!! — su grito me hizo sonreír.

— No tienes que gritar. — reí. — Bueno, ¿Te gustaría comer algo? Yo muero de hambre. — le propuse.

El asintió con su cabeza y juntos fuimos hasta un pequeño restaurante.

— Y... ¿El señor Frederick nos acompañará?

Di un sorbo a mi jugo de naranja. — Si, parece que Yoongi lo ordenó, y la verdad no quiero ocasionarle problemas.

— Wow, ¡Hobi! Eres el Omega de uno de los Ceo más importante de toda Corea. Deberías tener más de un guardaespaldas.

— ¡Jimin! — lo regaño. — Basta.

— Pero es verdad. Por cierto, ¿Que tal estuvieron anoche? — su sonrisa pícara me hizo sonrojar.

— No paso nada. Cenamos y dormimos, es todo.

— Y tú debes de estar decepcionado.

— ¡No!

— Jajajaja, solo estoy bromeando. O tal vez no, no lo sé, tú pareces bastante pensativo. — apoya sus codos en la mesa y acuna sus mejillas con sus manos. — Vamos, dime lo que quieres decirme.

— Yoongi me pidió que asistiera a una fiesta con él, parece que es el cumpleaños de la esposa de su amigo. Al principio quise negarme pero...

— ¿“pero"...?

Saque la tarjeta de mi bolsillo y se la mostré. — Me dió esta tarjeta, me dijo que quería que la usara a mi antojo y que comprara todo lo que yo quiera.

— ¿En serio te estás quejando?

— No me quejo, es solo que... No sé cómo debería usarla, nunca he salido de compras asi y tú lo sabes, ¿Que debería usar para ir? ¿Que zapatos debería elegir?

— Okay, okay, ya entendí. — Jimin se levantó y tomó mis manos. — Escúchame bien Hobi, tú y yo iremos a esa fiesta luciendo como los Omegas más hermosos del mundo. Yo me encargaré de eso.

— ¿Tú irás?

— Si, bueno, al principio tenía mis dudas pero Tae se encargó de convencerme. — sonrió ladino. — Vamos, tenemos mucho que ver y comprar.

— Déjame pagar la cuenta. — me levanté, pero Jimin me sujetó del brazo haciéndome girar.

— No te preocupes, yo pagaré la cuenta. — de su bolso de mano sacó una tarjeta negra. — Taehyung me la dió, y me dijo que si no gastaba una gran cantidad se molestaría conmigo.

Jimin pagó la cuenta y salimos del pequeño restaurante, nos acercamos hasta una tienda Gucci.

— ¿Estás listo? — me preguntó. 

— No.

— Pues yo si lo estoy.

Con una risa divertida en sus esponjosos labios entramos a la tienda.