El Mal vuelve a surgir de las profundidades de Terra, y alguien esta más que dispuesto a incinerar sus planes.
Arknights x Dark Souls
Arknights y Dark souls pertenecen a sus respectivos autores.
Volvía a la forja con una muy ligera pizca de entusiasmo, tenía buenas noticias sobre su equipo.
Su formación había terminado hace 2 días y mañana se iría a su primera misión como operador nuevo junto a un equipo ya formado.
Le habían regresado su cuchillo de titanita y su machete demoniaco pero aún así era muy pequeño como para hacer algo significante, pero hoy su arma y armadura se habían terminado de forjar y estaba de camino a reclamarlas.
Entró por la puerta que ni se molestó en tocar, siendo recibido por la Herrera Forte.
Vulcan : allí están - señaló
Primero vió el arma que solicitó, una Claymore estándar que podía blandir con algo de dificultad pero la suficiente como para maniobrarla. Hecha específicamente para el y toda suya.
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Luego le siguió la armadura, puesta en un maniquí de muestra, el aspecto era casi igual salvo los patrones de la túnica de azul.
Tomó el yelmo, recordando viejos momentos antes que la perdiera por una almeja devorahombres.
La examinó cuidadosamente de arriba a abajo, hizo un muy buen trabajo.
Vulcan : lo hice lo más ligero posible sin comprometer la integridad y dureza de manera significativa, 18 kilos de peso en una armadura
Cinder : perfecto...
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La misión iba a ser realizada por el equipo de operaciones de reserva A4 más la adición de Cinder, Melantha sería la líder del escudrón.
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La misión era simple, en una de las minas cerca de Lungmen se reportaba la desaparición de cargamentos de Originium, los vehículos desaparecían por completo y debían esta vez custodiar uno.
La propia lungmen trató de enviar agentes pero también lo hacian o daban un grito desgarrador antes de desaparecer también.
Esperaban al último miembro de su equipo en el hangar de vehículos, que no llegó a la hora indicada.
