Arknights : Cenizas De La Maldición Latente

Capítulo 3 : Adaptándose

El resultado de su acción resultó en unos agentes fueron desplegados para cazar su cabeza, empezaron a registrar los barrios marginales de Lungmen en busca del fugitivo.

A pesar de no conocer nada la ciudad sabía esconderse bien a pesar de llevar todo el equipo encima, no fue difícil hacerles perder su rastro.

Aunque patrullaban por diversas partes de la zona es fácil intuir donde se encontraban aproximadamente, no quería un combate directo con el riesgo a ser rodeado. Una muy mala táctica que le dolería mucho.

No era consciente de las habilidades de los híbridos, que tan fuertes eran respecto a capacidades físicas, magia, piromancias o milagros.

El encuentro que tuvo con aquel caballero demostraba que estaba al nivel, aunque no se enorgullecía de su ataque sorpresa era lo que era. Una victoria suya.

Para la gente común ver a un guardia corriendo por las zonas marginales era muy extraño, además de que varios más patrullaban cosa extraña salvo que buscarán a alguien.

Aún así no lo encontraron, siempre existía una forma de ocultarse, un callejón, una esquina oscura. Incluso pasar detrás de ellos en silencio.

Al pasar de las horas la búsqueda terminó, con el tiempo que pasó era suficiente como para hacerles pensar que no estaba y huyó a otra sección de la ciudad nómada. La razón que creían de porque no lo encontraron.

Se evitó enfrentamientos innecesarios por lo que no pudo evitar dar un jadeo por el esfuerzo que realizó. Una pelea a campo abierto con tantas personas podría ser complicado en su estado actual.

El cuerpo hueco que controlaba solo se sentía como una cáscara de piel seca al borde de descomponerse, y lo es biológicamente, frágil, débil, demacrado eran términos que encajaban perfectamente con el.

Vió muchos híbridos y no demostraban una apariencia hueca, esto haría que resalte demasiado incluso si lograra mezclarse con las personas con su cara actual.

Después de un largo tiempo por fin se dignó en sentarse, apoyando en una pared de un callejón de quitó el casco tomando algo de aire fresco con sus deteriorados pulmones. Aire fresco que entraba, aliento fétido el que salía.

La situación es difícil de comprender, aparentemente no hay humanos y solamente híbridos con partes animales, ahora las ciudades se mueven con tecnología que va más allá de su comprensión.

Además lo están buscando, ¿ Acaso ahora los humanos son considerados malvados por parte de aquellos híbridos ?.

Si es así estaría solo en un mundo que no conocía y lo odiaban, si tan solo Gwyn pudiera darle alguna pizca de poder milagroso para afrontar la situación.

La noche es oscura pero más amena en cuanto a su viaje pasado, antes solo estaba rodeado de muerte y cadáveres. Es muy distinto ahora, gente viviendo vidas comunes para ellos, no hay rastro de una verdadera preocupación por algo.

Eso lo relajaba, no hay muertos por la calle ni pistas de locura, todo es muy tranquilo ahora.

En el pasado hubiera dado su vida solo para morir sin preocupaciones sabiendo que el mundo seguiría, pero debía cumplir su deber como guardián.

Vió su reflejo en el visor del casco, en el observó con amargura su estado hueco y frágil, la última vez que se vió como humano fue usando el reflejo de la hoja de una brillante espada.

Pero eso fue hace tanto, ya que luego por cientos de años su rostro hueco fue ocultado bajo un yelmo de cenizas y atrapado en una armadura grande, un cuerpo que no le pertenecía a el en su totalidad.