9. Nuevos sentimientos.

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Kim Taehyung se hallaba en su cama acostado, con sueño movía sus patitas, anoche había quedado dormido tarde debido a un ataque de picor en la cabeza, ya no soportaba mucho el picor, se rascaba con fuerza pasando sus dedos intentando sacar las ramitas que salían por si solas.

De pronto se puso de pie, no tenía ganas de estar en la hora del té, se asomo en su balcón, el día estaba nublado, el aire le refrescaba la cabeza, se agachó para acomodar sus plantas, estaba hablando con ellas, sobre lo aburrido que estaba, pero teniéndolas de compañía se sentía más vital, cuando se giro para entrar de nuevo a su recamara, pego un brinco sorprendiendo a Hoseok entrando al balcón.

Santa flor, anunciate al menos— dijo lo cual Hoseok alzó las cejas.— No me mires así que a solas no pienso estarlo llamando Su Alteza a cada rato.

Hoseok se retiró los guantes de cuero, se encontraba con el pelo despeinado, viendo su perfil, concentrado en sus guantes, se veía solemne e imponía aunque estuviese distraído con unos guantes, seguramente venía de cabalgar.

Es la única manera de no ser interrumpidos, quiero hablar contigo.

¿Sobre qué?

Hoseok percibió de nuevo ese dulce aroma a flor fresca, un aroma que le causaban unas ganas de enterrar su nariz en su pelo, aunque ya le había aclarado al floricultor que no usará lociones con él, le sorprendía que ellos tuvieran olor propio dependiendo de lo que hacían florecer.

No te preguntaré de donde sacaste el dinero, me doy una idea debido una crema milagrosa que le alivió la artritis esta mañana a mi madre la Reina, tanto que volvió a pintar.— dijo acercándose a kim. — Pero creo que debo recordarte que soy un príncipe y estoy muy mal acostumbrado a mandar y a que se haga lo que yo diga.— kim retrocedió, su cambio de humor de un hombre serio y sereno a dominante y desquiciado le ponía los pelos de punta, era increíble el como se transformaba de una personalidad a otra, ¿Habrá sido eso que no le gustó a Lady Ágatha? Porque la entendía perfectamente.

No recuerdo haberlo desobedecido en algo...

La puerta comenzó a ser tocada, Hoseok miro la puerta harto, Taehyung comenzó a adentrarse para abrir, pero Hoseok lo sujetó del brazo jalandolo a su posición inicial solo que esta vez tenía un brazo alrededor de su cintura y lo apretaba contra su pecho.

¿Haciendo lo que se te place? Ves a lo que me refiero, tienes que obedecerme a mi. —

Seguían tocando en la puerta.

Pero estan tocando, pensaran mal si no abro...— dijo en voz baja.

Que sigan tocando...— Hoseok sentía el olor del floricultor como una caricia en las fosas nasales, sin poder evitarlo y casi instintivamente acercó su nariz a su cabello— He sido indulgente permitiendo que me interrumpan cuando se les de la gana.— dijo oliendo tranquilamente la cabeza del floricultor, una flor descansaba allí, Kim no se movía, estaba totalmente tenso, sin pensarlo mucho Hoseok abrió la boca y atrapo entre sus dientes una flor, la saboreo con la boca, sabía dulce, como si hubiera tomado una golosina, sintiendo la explosión de sabor en sus papilas gustativas, ¿Así de deliciosas sabían las flores de los floricultores?, absorto en sus pensamientos iba a tomar con la boca otra flor hasta que una voz se escuchó atrás de la puerta.

¿Su Alteza?— se escuchó a Lady Agatha.

Taehyung suspiro aliviado, confiado de que Hoseok lo soltaría, se relajo en sus brazos esperando a que lo soltase y fuera abrirle la puerta a Lady Agatha, miro a Hoseok pero este lo miraba con una sonrisa mofa.

Flores y Espinas HOPEVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora