Light a Flame (WonHui)

𝟑𝟓. 𝐌𝐨𝐜𝐤 𝐎𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞

Wonwoo y Mingyu se acercaron alarmados hacia Jun que parecía desesperado.

—¡Ese maldito! Esto fue una distracción, una trampa, pero no para nosotros —dijo, alterado.

El alfa azabache se acercó a él y lo tomó de los hombros.

—Junnie, tranquilo, necesito que me digas que decía la grabación.

El omega estaba respirando con agitación y tenía un gesto mortificado muy marcado. Luego su mirada fue hacia Mingyu y lo miró con dolor.

—Es Minghao... Fue por Minghao —dijo, con la voz cortada, porque sabía que El Carpintero se refería a Minghao, su mejor amigo.

El moreno abrió poco a poco sus ojos.

—No puede ser... —Mingyu tomó su celular y marcó rápidamente a Minghao, poniendo una mano en su frente, comenzando a respirar agitadamente también porque la ansiedad y la preocupación lo golpearon con fuerza—. Contesta, mierda, contesta...

Junhui lo miró con pesar porque sabía que habían perdido tiempo ahí y que El Carpintero había ido directamente con su amigo. Wonwoo también estaba preocupado.

—Grillito... —dijo, bajando las cejas, notando la frustración de Mingyu cuando no había respuesta de su pareja.

Mingyu gruñó, apretando el celular, volviéndole a marcar, pero de nuevo, nada, ni una respuesta.

—Tenemos que ir a su casa, ya.

Junhui asintió y Wonwoo frunció el ceño y apretó la mandíbula, usando el walkie talkie para poner al tanto a Seungcheol de que ahora tenían que moverse a la casa del médico forense de la unidad.

Se movieron al auto del médico y no perdieron el tiempo en manejar a la casa de Minghao.

En el momento en que se dieron cuenta del propósito verdadero de El Carpintero, Minghao se encontraba en la cajuela de un auto, con una cinta en la boca y las muñecas y tobillos atados, totalmente drogado con ketamina, con la realidad distorsionada y en delirio.

Las patrullas fueron en dirección de la casa del médico forense y Mingyu se bajó aunque Jun apenas había estacionado el auto, pero el médico y el inspector jefe también estaban apurados.

Mingyu corrió a la casa de Minghao primero y se dio cuenta de que la puerta estaba abierta.

—¡Minghao! ¡Hao! —entró en ella, llamando a su omega, pero algo lo detuvo, un cassette en el suelo, con una nota encima. Cómo evidencia habían llevado la reproductora de cassettes, así que Wonwoo entró y vio a Mingyu con la mirada puesta en ese cassette con los puños cerrados y un gesto de ira.

Wonwoo también estaba enojado y preocupado, Junhui entró corriendo detrás, llamando a su amigo de igual manera, pero no recibiendo respuesta.

—Hay sangre en el suelo... Tenemos que comprobar que sea de... Mierda, puta mierda —Wonwoo se pasó una mano por el cabello y gruñó.

—No puede estar pasando, esto no puede estar pasando, no a mi Minghao, voy a matar a ese hijo de puta con mis propias manos. —Los ojos de Minghao también vieron la mancha de sangre y Junhui la notó, llevándose las manos a la boca.

La nota ponía: "Para el Dr. Moon, escúchala en compañía"

—No... Esto es mi culpa, debió de llevarme a mí no a Haohao —sintió las lágrimas comenzar a caer y Wonwoo era el único que a pesar de también tener miles de sentimientos negativos porque Minghao le importaba mucho, era el que tenía la cabeza un poco más fría.

Sacó unos guantes de látex que tenía siempre en el pantalón y se los colocó, agachándose y tomando el cassette. Tenían que escucharlo, era evidencia. Y tenían que estar seguros.