─¿Becca? — su amigo toca la puerta de cristal y se asoma.
─Pasa, Gemini, estoy terminando de editar unas fotos, ¿ya volvió Saro? Mi próxima cita inicia en unos 20 minutos y esperaba verla antes de irme.─ Le dice sin siquiera despegar sus ojos -enmarcados con unas lindas gafas- de la pantalla.
─Sí, por eso vine, quiere saber si vas a tomar el almuerzo con ella.
─No lo creo, me quedan solo 20 minutos, no alcanzamos siquiera a salir.─ Becky despega los ojos de la pantalla por fin. Y sonríe cuando ve a su novia detrás de Gemini. ─Aquí estás, Saro.
─Aquí estoy, bonita. ─Dice pasando y abriendo la puerta también para Gemini. ─Como no tenemos tiempo he traído Ramen instantáneo, ¿te quedas, Gemini?
─No, yo comeré con mi alfa, que ya sabes que es un cabezota y cuando tiene trabajo no come si no lo obligo.
Cuando la alfa y la omega están juntas el ambiente cambia, es fácil sentir las ligeras feromonas de felicidad rondando por el aire y no solo eso, es fácil de observar, aún si están a la distancia las miradas de felicidad que se dan, el brillo de los ojos de enamoradas.
Y no es que ese peculiar brillo no esté ahí, no es que en el ambiente no se perciban las feromonas de unos enamorados ni la felicidad a su alrededor, pero tampoco es que no se pueda sentir esa pequeña tensión a su alrededor, solo un poco perceptible, solo un poco presente.
Y si bien ambas lo notan, Freen es la primera en hablar.
─Becca, amor...─Deja el ramen sobre el escritorio y toma la mano de Becky. ─Yo... Sé que no lo hemos hablado, pero... Hay un doctor que creo que podemos ver, ¿sabes?
─¿Un doctor, Freen?.
Cuestiona, apenas habían pasado dos semanas desde el "incidente". No habían ignorado el tema, pero no buscaron una solución, continuaron con sus vidas como si aquello no hubiera dejado una pequeña marca, como si cada vez que hacían el amor Freen no intentara evitar su cuello, como si -y aunque Becky amaba abrir una y otra vez la mordida en el cuello de su alfa- no anhelara una mordida en el suyo.
─Yo... Sé que no es lo normal.
─No importa lo normal, no tiene que ser raro, ¿sabes?
─Lo sé. Es solo que tu no deberías estar pasando por esto, amor. Estar con un alfa que ni siquiera puede dejarte una mordida correcta.
La alfa baja la cabeza, y tal vez no es lo normal en un alfa, pero con Becky... con Becky lo normal no importa porque con ella todo está bien. La omega extiende su brazo y toma su barbilla.
─Alfa, levanta la cabeza.─ Freen niega, no se siente suficiente para alguien como ella, para una omega perfecta, no solo físicamente, con una personalidad tan deslumbrante que llena la habitación a la que entra, alguien con tanta energía que se siente brillar, alguien con esa peculiar luz propia, perfecta en tantos sentidos que la vuelve loca.─Alfa, saldremos de esto.
─¿Y si no?.─Le pregunta. ─¿Y si nunca soy capaz?
─No pienses en eso, Saro, lo vamos a resolver.
─¿Y qué va a pasar si no, Becky? No puedo permitir que estés con un alfa que ni siquiera te puede dar una mordida, no mereces esto.
─No vuelvas a decir eso, Sarocha Chankimha. Jamás digas eso. Prefiero mil veces jamás tener una mordida a no tenerte a ti, Freen.
─Pero...
─Sin peros, no hay opciones aquí, ¿entiendes? Para este punto eres Mí alfa quieras o no.
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Mordiditas「 Freenbecky 」
Fanfiction❝ Cuando quiere cariños, cuándo está enojada, celosa y más aún, cuando el celo se acerca... a Becky le gusta morder.❞ ┋ Historia original escrita por fangirlglam ┋ Pequeños cambios realizados por: Lau Pimentel ┋ Capítulos cortos y sin seguimiento de...