- ¿Quién es? -pregunta y yo cuelgo la llamada
-Mi madre -respondo- nadie importante, tranquilo.
-Fue muy rápido, ni entendí que paso -dice riendo.
-Fuga de gas, ¿no? -pregunto y el niega
-No sabría decirte que fue, pero no sé si se llame fuga de gas -responde y yo hago una mueca
-Me llamaron -confieso y el me mira confundido- que todo lo que pase de aquí en adelante seria mi culpa -el niega.
-No le hagas caso a ese maldito -dice Alan molesto.
- ¿Cuánto tiempo estarás acá? -pregunto y Alan solo hace una mueca- ¿Alan?
-Unos días -responde molesto.
- ¿Cuántos? -pregunto nuevamente
-3 días más
-Ah, no es tanto a comparación de otros casos -digo y lo miro- tuviste suerte Bloomgate.
- ¿Al tenerte aquí? -pregunta y sonríe.
-No, al que no paso nada grave -respondo molesta.
-Ah, sí.
-Tienes que hacerles caso a las enfermeras Alan -ordenó y el solo voltea los ojos- cuando te digan que te tomes las cosas, las inyecciones, todo.
- ¿Por qué mejor no me cuidas tu? -pregunta haciendo un puchero.
-Porque no trabajo aquí, quizás -digo sonriendo y el solo voltea los ojos.
-Escuche que una enfermera renuncio -dice Alan haciéndome ojitos- podría recomendarte...
-Debo volver a mi ciudad, Alan...
-Pero yo quiero que te quedes -hace un puchero.
-Sabes que no puedo... -digo triste y el solo me mira.
-Igual puedo hablar para que te llamen, tengo contactos aquí -sonríe y yo niego.
-Aunque te diga que no, se que no me harás caso Alan -digo y el solo ríe.
-Ven siéntate aquí -me hace un espacio en la cama y me siento- me alegra mucho que estés aquí, Ly
-A mí me alegra saber que estas bien, Alan -digo y le saco un mechón el cual tapaba sus ojos- estaba muy preocupada por ti, no dejaba de pensarte.
-Vaya, así que piensas en mi -dice y yo solo rio- pues estas de suerte porque tampoco salías de mi mente.
-Ah, ¿sí? -pregunto riéndome.
-Voy a empezar a cobrar arriendo -dice y yo solo sonrió.
-Eres un tarado -digo y le hago cariño en su brazo el cual estaba un poco morado- ¿Qué te pasó?
-Discutí con un oso -dice y yo solo volteo los ojos- me pincharon mal.
-Horrible diría yo -lo miro espantada- ¿Quién fue? -pregunto y el solo ríe- no estoy bromeando.
-No te preocupes, es la que mejor me ha inyectado en este hospital -dice y yo lo miro- ¿Vas a soportar no verme todos estos días? -pregunta Alan y yo niego.
-Vendré todos los días, Alan -digo y el solo sonríe- hasta que ten den el alta.
-Mmm, parece que la que no aguanta sin verme es otra -me mira riéndose y yo niego con la cabeza.
-Porque sé que nadie te va a cuidar como yo -admito y el solo me mira.
-No te pongas celosa, preciosa mía, siempre serás mi enfermera favorita -dice y yo me sonrojo.