Capítulo 5

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/Sanji/

¿Cómo podría saber si tenía envidia?

Era la única pregunta que tenía Sanji en toda la semana que había pasado. Pues siempre sin excepción de un día tenían entrenamiento y de allí Zoro mostraba sus malditas capacidades a la hora de jugar, lo cual a Sanji sin ningún motivo o justificación le molestaba el solo hecho que fuera bueno en eso. Quería acabar con esa sensación, con esa incertidumbre de desprecio hacia alguien en el cual no se sabía nada de su vida ni del porqué era tan bueno en todo. Debía buscar ayuda.

Buscó en su mente alguno de sus amigos para que lo ayudaran pero no había alguien acorde a sus necesidades, bueno quizás podría pedirle ayuda a Robin ella era sensata y madura, si hablaba bien podría ayudarlo. Así que ya decidido toma su celular y sin pensarlo dos veces llama a Robin.

¿Linda Robin?

                                                                                                             Sanji dime ¿necesitas algo?

Necesito que me aconsejes y ayudes en una situación ¿Puedes?

                                                                        Si claro. Nos vemos en el "Café de amigos" en 10 minutos.

Me parece bien. Nos vemos.

                                                                                                                        Adiós.

10 minutos no era mucho para vestirse, así que como había ido a la universidad salió así sin más. Caminó lento hacia el café que había mencionado Robin, pues ese era el lugar donde Sanji y sus amigos siempre se reunían, era muy querido por todos por los recuerdos que habían recolectado a lo largo de los años. Así que cuando aunque sea dos personas del grupo se reunían, siempre el lugar de encuentro era ese.

Llegando al café se sienta en la mesa de una esquina que se encontraba vacía. No pasó mucho tiempo cuando se escuchó la campana de la puerta en señal que había llegado alguien. Sanji sube la mirada y sin creerse en la majestuosidad de mujer que caminaba hacia él se levantó y arrodillándose toma la mano de la mujer y deja un suave beso en la muñeca.

-Te ves más hermosa que antes mi querida Robin.

-Gracias Sanji- responde esta con una sonrisa y sentándose en la silla opuesta.

-¿Vas a querer algo?- pregunta Sanji entregando a Robin el menú.

Aunque ya sabían muy bien lo que ofrecían en el lugar, era importante ver las opciones que habían y elegir la que estuviera más a su gusto y a la ocasión, por lo cual Sanji iba a pedir un café negro.

-Una malteada está bien- responde Robin levantando el brazo dirigiendo su atención a las camareras.

-¿Qué van a pedir?- pregunta una señorita acercándose a la mesa.

-Una malteada y un café negro, por favor- responde Sanji mirando embelesado ante la semejante mujer que lo atendió.

-En unos minutos traen su orden.

Sanji sonrió a Robin y esperó ansiosamente a que el pedido llegara, pues no le gustaría empezar con la conversación y que después los interrumpieran, no le gustaba la interrupción en algo importante. Así que Robin también con una sonrisa esperó mientras miraba fijo al peli amarillo. Sanji sabía que con esa mirada lo estaba examinando del porqué de su plática. Pasaron unos minutos y otra señorita con una sonrisa dulce, entrega los pedidos y se aleja dejando solos a Sanji y Robin.

Nuestro mayor reto (Zosan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora