Nuestro mayor reto (Zosan)

Capítulo 15

/Zoro/

¿Era una almohada? ¿Qué era ese aroma y suavidad que lo abrazaba por el cuello? El peli verde al abrir los ojos se encontró con un pecho descubierto, donde se podía ver una piel tersa y pálida. Zoro tratando de saber que era lo que pasaba, recordó que la noche anterior no había podido acomodar a Sanji y por ese motivo quedaron abrazados mientas dormían.

No se arrepentía, era la primera vez que dormía así de pegado con Sanji. Pues todas las noches aunque durmieran juntos sus pieles nunca se tocaban, ni siquiera cuando estaban profundamente dormidos. Pero ahora el peli verde se da cuenta de lo que se ha perdido, era una linda sensación. Donde su corazón latía con calma, como si estuviera viendo un atardecer y al lado el amor de su vida. ¿Sanji era el atardecer o... el amor de su vida?

El peli verde tratando de no quedarse nuevamente dormido, con cuidado quita los brazos de Sanji de su cuello y al estar libre se levanta y agarrando una toalla entra al baño. Allí se quita toda la ropa y entra a la ducha, al abrir el agua y ésta al golpear el rostro de Zoro, este se despertó por completo y al estar metido en el agua por algunos minutos, se enjabonó y juagó.

Al terminar de bañarse se coloca la ropa interior y antes de colocarse el short vio como la puerta del baño era abierta y seguido con Sanji entrando frotándose los ojos. Zoro al ver a Sanji se queda estático y cuando el contrario lo vio, también se detuvo en su puesto mientras miraba de arriba abajo al peli verde.

Zoro al darse cuenta de cómo estaba "vestido" se colocó rápido el short y agarrando la camisa que a su lado se encontraba, también se la colocó rápido. Al terminar volteó a ver a Sanji y este estaba sonrojado y con una gota de sangre saliendo de su nariz.

-Carajo Sanji mírate- habló Zoro rasgando un pedazo de papel higiénico y colocándosela en la nariz del contrario.

Cuando el papel empezó a absorber la sangre, agarró con cuidado el cuello del contrario y lo empujó hacia atrás para que la sangre dejara de salir. Mientras la sangre era absorbida los pensamientos de Zoro no se detuvieron.

Realmente el añil era un maldito pervertido. ¿Cómo pudo haber sangrado con solo ver al peli verde en interior? Era chistoso si se pensaba bien, pero a la vez era lindo de cómo había quedado allí quieto y con mirada lujuriosa veía a Zoro. Aunque para el peli verde era algo incómodo, es decir no importaba si él lo veía semidesnudo, el problema era que no se había esperado que apareciera tan de repente. Esa era la razón por la cual ahora sus mejillas estaban algo coloradas.

-Báñate- afirmó Zoro quitando el papel y botándolo a la basura. –Recuerda que hoy son los exámenes, no debemos distraernos- aclaró Zoro agarrando su toalla y sonriéndole a Sanji quien estaba como la sangre de rojo.

No se esperó una respuesta y salió del baño, allí mientras a cada segundo veía la puerta del baño, se quitó la ropa y se colocó la que iba a usar para ir a la universidad. Al estar ya vestido se relajó y con más calma se colocó unos zapatos, los ató y se echó perfume.

Salió del cuarto y se dirigió a la cocina, donde iba a preparar las malteadas para la energía y un desayuno normal. Preparó el batido y mientras estaba en reserva, hizo unos huevos salteados con unas tostadas de pan, café tinto y unas uvas como postre, pero en este caso sería un postre saludable.

Cuando ya todo estaba listo, lo sirvió en dos platos y los llevó al comedor, como ya estaba servido todo, el peli verde se sentó y mientras esperaba al peli amarillo para comer juntos. Comer juntos, nunca creyó que eso fuera a pasar en su vida. Jamás había esperado a alguien para comer, pero ahora estaba esperando a un añil pervertido para comer, pero ese añil era el que siempre estaba en sus pensamientos.