Capítulo 13: Deberíamos decirle a Missa.

197 38 10
                                    


°

° Spreen °


- Mierda... osito podrías pasarme mi teléfono por favor – pide mi arañita de forma agitada, gruño sin poder evitarlo.

- Ro... ¿para qué quieres tu teléfono? – me quejo tomando bocanadas de aire aun en medio de la nube post orgásmica, aun me hormigueaban los dedos de los pies.

- Pues para avisarle a mis papás que me voy a quedar hoy... no siento las piernas – dice entre jadeos sin poder evitarlo sonrió con ego.

- Ok, dame un momento – suspiro realmente feliz, garchar con Roier era el maldito paraíso.

- Tal vez deberíamos vestirnos – sugiere ya con la voz más estable, me levanto buscando su teléfono en su pantalón.

- Missa no vuelve hasta dentro de un rato – me encojo de hombros tumbándome de nuevo a su lado dándole su celular.

- Gracias osito – me da un besito en el hombro.


Me quedo en silencio para no interrumpir su llamada, solo le doy caricias amorosas en su abdomen y pecho, lo escucho decirle a su madre que hoy se quedaría a hacer pijamada con Missa y conmigo, lo veo hacer una mueca y después de sonroja intensamente, el niega diciéndole que no es para tener sexo que nosotros no hacíamos eso por las noches cuando se quedaba, solo puedo sonreír porque eso era verdad, pero sí que teníamos sexo por las tardes cuando teníamos el apartamento solo, siguió explicándole que no era para eso, después se quedo escuchando por unos momentos antes de suspirar, se despide de su madre y cuelga la llamada.


- Dice mi mamá que si vamos a coger no seamos desconsiderados con Missa y no hagamos ruido – me cuenta rodando los ojos antes de darme su teléfono el cual pongo en mi mesita de noche.

- No creo que vos quieras garchar de nuevo por la noche... ¿o si arañita? – digo coqueto acariciando la extensión de su torso hasta el hueso de su cadera.

- Podría... no mames la neta en estas ocasiones si creo que somos bien pinches calientes, cogemos un chingo – dice comenzando a reír, sonrió apoyando mi cabeza en su pecho y automáticamente comienza a acariciar mi cabello.

- Yo creo que los pibes de nuestra edad tienen sexo con regularidad, tampoco es como si fuéramos adictos al sexo y solo pensáramos en eso – me encojo de hombros cerrando los ojos disfrutando de sus mimos.

- Bueno... solo somos un poquito calientes – se ríe ligeramente, tarareo de acuerdo – osito... he estado pensando en algo.

- ¿Vos pensas? – me burlo un poco ganándome un ligero tirón en el cabello.

- Pendejo, hablo enserio – se queja lo que me hace abrir los ojos e incorporarme ligeramente para verlo al rostro.

- Decime arañita, ¿en que has pensado? – me sonríe dulcemente acomodando mi cabello húmedo y no me cayera a los ojos.

- Bueno... nosotros llevamos juntos casi tres años, en mis clases hemos estado viendo la teoría de Robert Sternberg, básicamente es la teoría del amor, sé de sobra que lo nuestro es real y bastante intenso, pero eso también me recordó que a pesar de amarte y saber que es reciproco... no sé si hayas pensado en un futuro juntos – me ve a los ojos atentamente, frunzo ligeramente el ceño.

He is an Angel | AU QSMP/Spin-Off | SpiderBear.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora