Dias Despues
Iván
Me despierto y lo primero que veo es a Angelique recostada sobre mi pecho, debe haberse movido durante su sueño. Me acuesto con ella con la excusa de que quiero vincularme con mi bebé, no miento acerca de querer un vínculo con mi bebé, pero tambien quiero estar al lado de Angelique y, con suerte, conquistarla poco a poco. Sé que llevará tiempo pero eso es exactamente lo que quiero hacer. La amo tanto, me tomó tiempo darme cuenta, pero es un sentimiento que siento dentro de mí, amo a esta mujer con mi vida.
No me muevo, solo la miro y disfruto de este momento antes de que ella despierte y se aleje de mi. Ella me tolera pero ha establecido límites, no me da la oportunidad de acercarme demasiado, solo me permite estar cerca de ella por el bebé y eso es todo.
La miro por unos minutos más y decido levantarme con mucho cuidado y arreglarme. Le ordeno a la mujer de servicio que haga el desayuno más saludable posible para mi Angelique y mi bebé. Cuando termina, agarro la bandeja llena de comida y se la llevo a mi bella durmiente hasta la cama. Entro a la habitación y ella todavía está durmiendo. Puedo ver su pequeño cuerpo debajo del edredón. Coloco la bandeja llena de comida en la mesa de noche y abro las cortinas para dejar entrar los rayos del sol.
Ella inmediatamente comienza a despertarse y se sienta en la cama, no puedo evitar sonreír al ver su cabello desordenado. Ella siempre es muy exijente con su imagen. Vestida extremadamente elegante y siempre muy bien arreglada. En este momento, con las hormonas del embarazo y su reposo en cama, por lo general usa pijamas cómodas todo el día, lo cual no es habitual en ella, pero se ve aún más espectacular a medida que el brillo del embarazo se muestra cada vez más en esa carita bella que me enamora cada dia mas.
—Buenos días ¿cómo dormiste bonita?
—Bien no me puedo quejar, aunque me encantaría estar en mi casa.
—Esto no va a suceder, no me convencerás de hacer tal cosa. Simplemente relájate unos días más y hablaremos de ello. Mira, te traje el desayuno, jugo de naranja recién exprimido, tal como te gusta. Anda come mi bebe debe tener mucha hambre.
—En realidad tengo muchas náuseas.
—Al menos inténtalo hermosa.
Ivan se sienta conmigo y comemos juntos. Ha sido muy, muy amable conmigo que me asusta. Tenemos una rutina en la que desayunamos juntos. Él se va a trabajar pero me llama con frecuencia para asegurarse de que el bebé y yo estemos bien.
—¿Quieres explorar el rancho un poco? Quizás un poco de aire fresco te vendrá bien.
—Sí, me gustaría eso, estoy cansada de estar en esta habitación.
—Está bien, podemos hacer eso.
—Podemos?
—Sí, hoy estaré contigo todo el día. Me tomé el día libre en el trabajo. Estoy a tus ordenes te consentiré con lo que quieras hoy.
—¿Estás seguro de que estás preparado para el desafío? Soy una mujer muy exigente, ¿lo sabes, verdad?
—Sí, estoy bastante seguro de que puedo arreglármelas.
—Bueno, quiero un día de spa y se me antojan muchos snacks y los quiero todos.
—Puedo hacer eso ¿qué mas quieres?
—Necesito un masaje en los pies pero antes necesito una pedicura ve a comprar todo lo necesario para eso.
—Pero.....
—Pero que ¿Pensé que podrías arreglártelas?
—Olvídalo sí, si puedo.
—Quiero un esmalte de uñas rosa pálido, algo elegante, algo bonito. Tambien quiero un masaje en la espalda. Y los snacks que se me antojan son palomitas de caramelo, pizza, fruta fresca, agua fresca de jamaica. Tambien quiero que me compres una almohada de embarazo para que pueda dormir cómoda por las noches.
