seis

125 16 2
                                    

No entendía porque estaba pensando en aquello, que me importaba si no me escribía. Para que me entiendan mejor, después de aquel encuentro con leehan y woonhak, por alguna razón que desconozco leehan no me había vuelto a escribir. Tampoco es que quisiera que lo haga pero cuanto había pasado desde que nos volvimos a ver ¿dos semanas? ¿tres semanas? realmente no lo sabía pero en tan poco tiempo ya era algo diario que escriba y me resultaba extraño que no lo hiciera.

Estaba acostumbrado a que siempre me esté diciendo "puedes hablar un poco más, no se te va caer el dedo por poner unas palabras más" o que me pregunte siempre como estaba. Por esa razón no hay que tener un chat diario porque cuando ya no está, se siente un vacío feo.

Pero claro, no es que yo tenga miedo a acostumbrarme a alguien ni nada de eso. Yo estaba bien así, solo, eso es todo.

En lo que mi mente se preguntaba que había pasado con leehan mis manos se pusieron a limpiar todo, en un rato debía ir a la universidad. Tenía que meterle más velocidad o llegaría tarde.

Termine de poner las sillas en su lugar y fui corriendo a darme una ducha. Me vesti con un suéter blanco y unos pantalones negro y salí directo a la universidad.

En cuanto llegue, trate de no distraerme por el camino hasta llegar a mi clase pero no pude. Mis ojos no pudieron evitar mirar hacia donde se encontraba woonhak y como era de costumbre para mí, en estos días, también ví a leehan. Me encontraba con el más de lo que quisiera. Trate de no mirar para el lado en el que ellos se encontraban, pero para mí mala suerte sentí la mirada de leehan y luego la de woonhak.

– ¡Tae! ¡Aquí! – grito woonhak levantando las manos como si hubieran demasiadas personas como para que no lo viera.

Aunque estuviera llegando tarde me acerque a ellos para saludarlos.

– Hola chicos.

– Hola Tae – woonhak me saludo mientras me daba un abrazo – ¿O prefieres taesannie?

– Prefiero mi nombre, solo dime taesan.

– ¡Vamos pero a leehan lo dejas que te llame taesannie! – sonreí, woonhak de verdad parecía un bebé ahora entendía porque jaehyun siempre estaba tras suyo.

Por primera vez en lo que llevaba de conocer a leehan, cuando lo mire, este no me devolvió la mirada, parecía que lo habia evitado.

¿Se había enojado solo por eso? digo no es que fuera la gran cosa que lo dejara hablando con jaehyun. Bueno tal vez a mí también me molestaría un poco pero no tanto. Igual no sé si tenía mucho derecho a opinar sobre eso ya que yo le tenía rencor solo porque nunca me llamó ¡Pero yo tenía mis razones! él fue el chico que me gusto por años, yo de él no era nada, ni siquiera me recordaba.

– ¿Que estudias? Puedo acompañarte hasta tu clase, leehan ya se va.

– Ingeniería civil.

– Eso es muy interesante, también me gustaba esa carrera.

– A ti te gustaban todas, woonhak – menciono leehan.

– ¡Es muy difícil! No sé quién tuvo la grandiosa idea de que a los 18 años uno ya debe saber lo que hará por el resto de su vida.

– Entonces, ¿Qué estudias? – le pregunté.

– Música.

– Que divertido, yo también quisiera estudiar algo así.

– ¿Por qué no lo haces?

– Mis papás no estarán muy de acuerdo.

– Es tu vida, no la de ellos – yo sabía eso pero prefería hacer lo que digan a qué discutan entre ellos por mi culpa, una vez más.

número Donde viven las historias. Descúbrelo ahora