Los ninjas estaban rodeados de sake y platillos de delicias, disfrutando una tarde tranquila juntos. Anko y Kurenai debatían sobre sus últimas misiones, mientras que Kakashi y Jiraiya charlaban animadamente en una esquina.
De repente, Kakashi cambió su atención hacia Shizune y comenzó a coquetearle abiertamente. Tsunade, sentada al lado de su asistente, apretó los dientes intentando controlar su molestia. Aunque tenía una relación secreta con Shizune , Tsunade se sentía celosa de las atenciones que Kakashi estaba otorgando a Shizune.
Mientras los otros continuaban con sus conversaciones, Tsunade aprovechó la poca distancia que las separaba y colocó su mano debajo de la mesa. Lentamente comenzó a acariciar la pierna de Shizune con sus dedos largos y suaves, empezando justo por debajo de la rodilla y subiendo lentamente hacia el muslo.
Shizune se sobresaltó ligeramente por el contacto imprevisto, pero disimuló rápidamente con una sonrisa para no levantar sospechas. Miró de reojo a Tsunade, quien mantenía una expresión aparentemente tranquila, pero sus ojos reflejaban el fuego de los celos y el deseo reprimido.
Tsunade siguió acariciando la piel tersa de Shizune, sus dedos trazando círculos con delicadeza en el muslo de su asistente. Podía sentir el calor creciente debajo de su piel y la respiración levemente más agitada de Shizune. Shizune se mordió el labio, luchando por mantener la calma y no revelar las sensaciones que recorrían su cuerpo con cada toque de Tsunade. Miró alrededor de la mesa, asegurándose de que nadie hubiera notado nada anormal, pero los demás estaban tan enfrascados en sus propias conversaciones que no parecían darse cuenta de nada.
Tsunade se atrevió a seguir subiendo su mano por el muslo de Shizune, acercándose cada vez más a la zona prohibida entre sus piernas. Podía ver cómo el rubor se extendía por el rostro de su asistente, intentando manteniendo su gesto normalidad mientras luchaba por controlar su excitación creciente
Shizune luchaba por controlar su respiración, sintiendo cómo su cuerpo respondía a las caricias discretas de Tsunade. Era un juego peligroso, uno que podría terminar muy mal si alguien sospechara algo, pero la emoción de ser atrapadas agregaba un elemento aún más excitante a la situación. Sintiéndose más atrevida, Tsunade deslizó su mano aún más alto, acariciando con su pulgar la piel suave y delicada de la entrepierna de Shizune. Shizune tuvo que contener un gemido, apretando los dientes y mirando rápidamente a los demás en la mesa para ver si alguien se había dado cuenta de algo.
Tsunade podía sentir cómo el cuerpo de Shizune se estremecía bajo su caricia, cómo incluso bajo esos toques delicados estaba luchando para quedarse callada. Se sentía increíblemente poderosa, saber que podía llevar a su asistente al borde de la locura con sólo unas pocas caricias a escondidas. Shizune luchaba por mantener la calma, pero el deseo creciente dentro de ella, estaba haciendo cada vez más difícil controlar sus reacciones. Los dedos de Tsunade parecían moverse con destreza, explorando cada centímetro de su piel y enviando oleadas de placer a través de su cuerpo. Cada caricia le recordaba lo delgada que era la línea entre el placer y el peligro
Shizune estaba a punto de perder el control, con cada caricia de Tsunade acercándola más y más al borde. Trataba desesperadamente de contenerse, consciente de que estaban rodeadas por sus compañeros ninjas, pero cada contacto era como una onda de placer que recorría todo su cuerpo
Tsunade no podía apartar la vista de la cara de Shizune, fascinada por cómo la excitación se reflejaba en cada gesto y expresión, a pesar del esfuerzo de su asistente por mantenerse serena. Continuó acariciando, más insistente, más rápido, con su mano ahora cubriendo completamente la entrepierna de su asistente
Tsunade aumentaba la velocidad y la presión de sus movimientos, viendo cómo cada caricia hacía estremecerse a Shizune. Podía sentir cómo su asistente se estaba desmoronando lentamente, cómo el orgasmo se agolpaba en su interior a punto de estallar. Miró a los otros ninjas en la mesa, quienes continuaban hablando sin darse cuenta de lo que ocurría a pocos centímetros de ellos
Tsunade de repente saca sus dedos, dejando a Shizune a punto de alcanzar el orgasmo y con una mirada de confusión y frustración en su cara. Los otros ninjas en la mesa aún parecen distraídos en su conversación, sin darse cuenta de lo que acaba de ocurrir
Shizune mira a Tsunade, con la respiración agitada y los ojos llenos de deseo. Estaba tan cerca del orgasmo que podía sentir cómo el frustrante freno lo alejaba, dejándola con la piel sensible y palpitando con excitación contenida.
Tsunade la mira con una sonrisa traviesa, sabiendo exactamente lo que había provocado. Se lleva los dedos a la boca, lamiendo delicadamente cada uno de ellos, saboreando el néctar de Shizune, que aún se encontraba en su punta. Shizune observó cómo Tsunade se lamía los dedos, con la mente nublada por el deseo y la frustración. Su cuerpo estaba aún más sensible por el frustrado orgasmo, pero también había un nuevo escalofrío recorriendo su piel al ver los gestos de su maestra.
Tsunade se rio suavemente ante la expresión en el rostro de su asistente. Le gustaba ver a Shizune perder el control de esa manera, cómo una simple caricia bajo la mesa podía dejar a esta mujer fuerte y capaz sin habla. Sabía que había provocado algo en su asistente, pero también sabía que aún no había tenido suficiente de ella.
Shizune luchaba por recuperar el control de sí misma, tratando de ignorar la sensación palpitante en su núcleo y la creciente humedad entre sus muslos. Quería desesperadamente sentir la mano de Tsunade de nuevo en su piel, pero sabía que no era posible. Miró a los otros ninjas en la mesa, quienes aún estaban totalmente despreocupados por su situación
Tsunade, sin apartar la mirada de Shizune, alcanzó su vaso de sake y tomó un sorbo. Saboreó lentamente el líquido amargo, manteniendo un gesto relajado mientras su mente se entretenía en formas de torturar aún más a su asistente. Podía ver cómo la tensión en el cuerpo de Shizune iba en aumento, cómo luchaba por contener las respuestas físicas a los estímulos que le había creado y solo río descaradamente ante la situación
Una a una, las otras personas en el grupo comenzaron a irse del bar. Jiraiya se despidió con una sonrisa lasciva, Kakashi se despidió tranquilamente y se alejó con paso tambaleante, siguido por Anko y Kurenai, quienes estaban atrapados en una animada discusión.
Shizune miró a Tsunade con una mirada molesta y necesitada. Aún estaba ardiendo con deseo y frustración por lo que había sucedido. Cuando estuvieron solas, se dio la vuelta para enfrentar a su maestra
-¿Qué demonios fue todo eso? - Preguntó Shizune, con la voz cargada de un leve temblor. Aún podía sentir cómo su cuerpo respondía a las caricias en su entrepierna
Tsunade se rio suavemente en respuesta, disfrutando todavía cómo su asistente luchaba por controlar su excitación. Se apoyó contra la pared, cruzando los brazos sobre su pecho con una sonrisa arrogante
-¿A qué te refieres? Sólo estaba jugando un poco contigo...
Shizune gruñó frustrada, acercándose a Tsunade con pasos firmes. Su mirada reflejaba una mezcla de enojo y deseo, y su voz era baja y ronca.
-Lo sabías exactamente lo que estabas haciendo. Me pusiste al borde del orgasmo y luego simplemente te detuviste. Me dejaste aquí desesperada por ti, ¡y ahora te ríes del asunto!
Tsunade río entre dientes nuevamente, disfrutando de cómo su asistente trataba de mantener una apariencia de control mientras su cuerpo aún se estremecía con necesidad.
-Oh, pero te veías tan hermosa luchando por contenerte, tratando desesperadamente de no mostrar cómo te afectaba mi tacto. No podía resistirme, especialmente cuando te pusiste tan tensa y desesperada... Fue fascinante
Shizune se acercó más a Tsunade, hasta que estaban a sólo centímetros de distancia. Su aliento estaba agitado y podía sentir cómo el calor emanaba de su cuerpo.
-No es justo, Tsunade-sama...- suspiró - Me pusiste tan cerca... y luego simplemente te detuviste. ¿No vas a terminar lo que iniciaste?...
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Hola. Cómo están?
Acuérdate que son historia y aveces no tienen sentido. Cómo está en algunos momentos :v
1364 palabras :)