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VÍCTOR RECARGÓ SU CABEZA SOBRE LA MÍA. Ambos estábamos casi acostados sobre el asiento del carruaje mirando la única distracción: la ventana. Los árboles pasaban con velocidad, uno tras uno.
O nosotros pasábamos a gran velocidad.
Estaba adolorida y contractura, pero no podía quejarme. De nada serviría. Ya no nos harían caso. Víctor, mi hermano mayor, había hecho que nos detuviéramos seguido ocasionando que el atardecer nos alcance.
Debíamos estar a mediodía y viajar de noche no era una opción, sobre todo cuando no conocíamos estos descuidados caminos.
— ¿Por que no duermes un poco, princesa? —murmuró papá con su acento británico, acomodando a mamá sobre su pecho.
Somos los únicos despiertos.
— No tengo sueño. Y escuchar los ronquidos de Víctor no es muy placentero, padre.
Mi padre, Edward Kingsley, es la cabeza de la familia, un gran hombre, empresario, padre y esposo. Es un excelente orador, siempre sabe que decir y cuando decirlo. Es un impulsante del futuro y un amante de los telegramas.
Justo en ese instante, hubo un golpeteó dentro de la boca de mi molesto hermano. Había roncado, otra vez.
Padre sonrío divertido de mi molestia.
— ¿Cómo es Avonlea? —preferí distraerme, antes que decidiera callar a mi hermano de una manera no muy grata.
— Es un lugar mágico. Tiene una belleza que ni los ojos pueden terminar de apreciar, un bosque sinfín y gente cerrada.
— ¿Cerrada? ¿No salen de sus hogares?
Papá negó.
— Son de mente pequeña. Le temen al cambio y prefieren su monotonía.
Asentí, fingiendo que le entendía cuando claramente no era así.
— Suena... elocuente.
— Me gusta esa palabra, Victorie—felicitó—. ¿De qué nuevo libro lo has leído?
Levanté la portada de aquel antiguo libro. La Alquimia de la vida.
Sonrío y descansó su cabeza sobre la de mi madre, que se removió en sueños, pero no despertó. Nos mantuvimos así la última hora y, justo cuando iluminaba el último rayo de sol, nos detuvimos frente una casa blanquecina.
— ¡Víctor, Víctor, Víctor! ¡Hemos llegado! —desperté a mi hermano.
Mi hermano abrió un ojo y luego lo cerró fingiendo roncar. Se divertía de mi exaspero al querer quitar su cuerpo encima del mío.
— ¡Quítate!
Cuando creyó que fue suficiente sufrimiento, se quitó soltando una risa. Madre nos miraba tallándose los ojos con una suave sonrisa y permitió que papá la ayudará a bajar el pequeño escalón. Suspiré al ver la manera en la que papá colocaba el saco de su traje sobre su esposa, sin importarle que el frío viento de Avonlea erizara su piel.
Víctor esperó a que recogiera la fichas que se me habían caído al fondo del asiento y me dio su mano para bajar. Yo no pude ser tan delicada como mamá, sobre todo porque la emoción era mayor y salí brincando como un cervatillo.
— Familia, bienvenido a Avonlea —murmuró mi padre frente a nuestra nueva casa.
La casa era más pequeña a lo que estábamos acostumbrados en Essex, Gran bretaña, pero acogedora. Es de dos pisos con grandes ventanales y unas lindas jardineras que presentía mamá les daría buen uso.
Lo que más emocionaba era que no a mucha distancia podía ver el inicio del bosque sinfín del que papá me hablo. No pude ver más allá, ya que la poca luz de la lámpara no alcanzaba gran distancia.
Mi madre, Amelie, originaria de este pequeño pueblo, fue la que puso orden entre nosotros. Por la poca luz que teníamos solo despolvamos los sillones y decidimos descansar ahí. Era la primera noche en un nuevo lugar, preferimos mantenernos juntos.
El cansancio nos venció uno por uno. No podía esperar a descubrir los secretos que ocultaba este lugar.
¿Avonlea, qué es lo que tienes para mí?
🍂 DECLAIMER 🍂
➻ Todos lo derechos está reservados a la autora, Lucy Maud Montgomery, y sus respectivos directivos de la adaptación de NETFLIX Cánada.
➻ Victorie, mi protagonita, y personajes no procediente de la serie original e implementados para el desarrollo de la historia y su futura secuela son de mi autoría.
➻ ¡ESTA PROHIBIDA SU COPIA Y/O ADAPTACIÓN SIN MI CONSENTIMIENTO!
¡Sean bienvenido, pequeños saltamontes!
Les presentó mi obra JUST YOU dirigida a Gilbert Blythe. Espero sea de su agrado y puedan disfrutarla tanto como yo lo estoy haciendo al escribir esto.
No olviden comentar (que adoro leerlos), votar y pasar a ver mi otras historias referidas al mundo de Percy Jackson.
WIth love, Freddie.
ESTÁS LEYENDO
JUST YOU | Gilbert Blythe
Romance━🍂 ❝Cause we were just kids when we fell in love not knowing what it was I will not give you up this time❞ 𝐉𝐘. Parece lejano los tiempos donde Avonlea perecería de monotonía. Tan solo hizo falta u...