Prólogo

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Esa noche fue la peor de mi vida. Saber que por mi culpa mi hermana había muerto , si hubiera estado con ella esto posiblemente no habría pasado y ahora me encontraba sentada frente a una agente de policía en un cuarto con paredes grises como el cielo de esa tarde antes del anochecer.

- ¿Estás lista? - me preguntó mirándome con pena en sus ojos.

Moví mis cabeza de arriba hacia bajo de forma suave y con mis ojos aún húmedos de llorar. Eran aproximadamente las 11 de la noche y apenas podía sentir cansancio.

- Empezaré con simples preguntas ¿Vale?- me quedé callada con mis ojos directamente a mis manos apoyadas sobre las mesas que nos separaba , al entender mi silencio prosiguió hablando- ¿Cuál es tu nombre?

Me quedé en silencio unos segundos y luego respondí.

- Britany Flower.

- ¿Era tu hermana gemela?- al escuchar aquellas palabras hablando en pasado podía sentir más presente que estaba muerta y no la volvería a ver.

- Sí - respondí.

- Lamento mucho tu pérdida-yo solo pude asentir con la cabeza y ella prosiguió hablando- ¿Estuviste con ella antes de que desapareciera ?

- Estuve con ella hasta el momento en que llegamos a la fiesta , luego me dijo que iría a buscar a Kailo y nos separamos.- las lágrimas empezaban a caer nuevamente por mis mejillas.

- ¿Quién es Kailo?- me preguntó apoyando sus manos entrelazadas sobre la mesa.

- Su novio.- la agente cada que respondía alguna pregunta anotaba cosas en una pequeña libreta que tenía a su lado y luego volvía a poner las manos sobre la mesa como si no se hubiera movido.

-¿ Sabes su apellido ?- negué con la cabeza y por primera vez desde que había entrado allí levanté la mirada hacia ella- ¿Sabes si se estuvieron comportando raro estos días o tuvieron alguna discusión?

- No , tenían una relación muy sana entre ellos pero nadie sabía de su existencia- dije moviendo las manos ansiosamente , esas que hacía unas horas estaban cubiertas de las sangre de mi hermana.

-¿Por qué nadie sabía?-me preguntó algo intrigada.

- No lo sé...- respondí.

En mi mente pasaban todos los recuerdos que tenía con mi hermana , sentía como me empezaba a faltar el aire y podía sentir cada vez más lágrimas recorriendo mi rostro.

-¿Estás bien? ¿Necesitas algo?- me preguntó la agente preocupada.

-Solo quiero ir a casa.- aquella mujer aceptó con su cabeza y con sus ojos llenos de compasión.

Seguido de eso me levanté de mi silla y me dirigí hacia la puerta , ya fuera pude ver a mis padres abrazados con sus ojos húmedos y rojos de llorar.

Al verme ,  corrieron hacia mí y me abrazaron con fuerza y entonces si empecé a llorar sin consuelo en sus brazos.

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