ABC del control

W de whisky

— ¿Por qué te gusta tanto esa bebida?

Apunto con el dedo, al vaso de whisky que tiene en sus manos.

— El sabor es reconfortante.

— Entonces W de Whisky. Significa que cuando vea uno me va a recordar completamente a ti.

Sonríe con esa diabólica sonrisa suya. Sus ojos se muestran juguetones cuando me responde, después de llevarse el vaso a la boca y beber de un solo trago lo que quedaba.

—Entonces cada que vea una bebida color rosa, voy a recordate eh

Se me escapa una risa—Si supongo que es una forma de verlo.

—Too Sweet.

— ¿Qué?

—Una canción, bastante popular.  Creo que describe algunos pensamientos que tuve cuando te he visto.

— ¿Cómo cuáles?

— Te lo dire después, ahora solo quiero tenerte aquí entre mis brazos.

Sin más que decir, me voy a sentar en su regazo. Él no dice más ni yo tampoco, cada uno de nosotros estaba enfocado en pensar en otra cosa.

El silencio se rompe, cuando su teléfono suena. El ritmo me gustaba.

—Hablando del diablo...—no entendí hasta que colgó su llamada, de la cual no entendí ni una sola palabra. Utiliza su lengua materna, según me ha dicho es para negocios.

— El tono es la canción que decías.

—Si lo es. ¿Te gusta?

—Si, es algo pegajosa. Crees que pueda oírla completa.

— No hay manera de negarte nada, pondré la canción de fondo. Mientras vamos a la cama, quiero recostarme.

...

Pasamos el día así, con la música sonando en la habitación. Él me contaba una obra de teatro, esa de un autor que lleva muerto muchos años. Me he reído a carcajadas y en esos breves instantes experimente lo que sentía cuando lo conocí, volvía a ser el hombre que me atrapo con su encanto, belleza y modales preciosos. 

Dormí con una sonrisa en los labios, besos tiernos y caricias delicadas.