My Idol

Capítulo 19: Una semana díficil (lunes, martes, miércoles y todos los demás)

—¿Supiste algo de Taehyung? —Seokjin tenía la esperanza que su amigo hubiese tenido mejor suerte que él.

—La verdad no hablo con él, desde anoche. No tengo ninguna llamada el día de hoy. Sólo intenté llamarlo ahora que venía a casa, pero sólo la grabadora. Deben estar realmente ocupados...

Seokjin estaba inquieto. Y sabía que Jimin también. Comenzaba a pensar si todo lo que estaba sucediendo no eran señales para advertirle que se estaba equivocando en sus acciones.

Comieron en silencio. Los dos tenían la cabeza a punto de explotar con el cúmulo de emociones que tenían.

Cuando finalmente sus celulares sonaron, y vieron que eran sus hombres que llamaban, sus corazones volvieron a latir.

Jimin se despidió de su hyung y partió raudo a su departamento para conectar la laptop y hablar con su Tae Tae, que aunque le costaba admitir comenzaba a extrañar demasiado.

Seokjin por su parte ya podía apreciar a un cansado Jungkook hablándole desde Seúl.

—Lo siento Seokjin, todo salió mal el día de hoy. Apenas tuvimos tiempo de comer algo y la sesión fue interminable. No pude ni siquiera tener un minuto de paz para llamarte.

—Kookie, te ves muy cansado... Te dije que no quiero que te sobre esfuerces... Yo...te extrañé mucho, pero lo entiendo. Sé que la vida de Idol no es fácil. Jimin me estuvo explicando todo el trabajo que implica y... lo entiendo.

—Te amo Seokjin, y eso me da impulso para seguir. Saber que a pesar de todo estas para mí. Gracias por no enojarte.

La verdad era que no estaba enojado, sólo un poco triste, pero al tenerlo frente a él aunque fuera sólo a través de una pantalla, lo tranquilizaba.

Hablaron un buen rato, hasta que Seokjin notó que Kookie casi se estaba durmiendo, así es que se despidió de él con un beso volador y un te amo.

El día siguiente no fue muy diferente. Seokjin ya estaba instalado en su escritorio con un gran vaso de café. Había enviado un pequeño mensaje a Kookie, que el menor ni siquiera había leído. Probablemente seguía durmiendo.

El día transcurrió normal. De vez en cuando Ken, cómo llamaban a Jae Hwan, le insistía sobre la gran oportunidad que estaba perdiendo por el tal Hoseok. Pero Seokjin parecía no querer escuchar. Estaba extrañado. Siempre consideró a su amigo y compañero un hombre maduro y racional y jamás lo había visto perder la cabeza por alguien. Se preguntaba que tendría de especial el hombre que quería arrebatárselo para llevarlo a Seúl. Sí, porque Ken aún tenía esperanzas de volver a ser aunque fuera el amigo con derecho, que alguna vez fue para Jin. Ese hombre le gustaba mucho y realmente en la cama, era muy bueno.

Cuando llegó la noche del martes y Jimin ya se había ido a su departamento para hablar con su Tae, al fin pudo ver a su conejito.

—¿Cómo es que cada día que pasa se hace más difícil no tenerte Kookie? Además me cuesta tanto comunicarme contigo...

—Lo siento Jinnie, es una época complicada. Tío Namjoon está empeñado que este disco brille más que el anterior y que alcancemos alguna posición en los top de USA. Si eso sucede, podríamos tener una gira por varias ciudades. ¿Te imaginas?, sería muy lindo que pudiéramos recorrer juntos los Estados Unidos.

—Jungkook...pareces olvidar que yo no podría acompañarte todo el tiempo. Las vacaciones son limitadas. Además dependerá de cuando programen ese tour...no lo sé...para ti es emocionante y me alegra por ti, porque lo mereces, de verdad...pero lo más probable es que yo me tenga que quedar en Corea y esperarte...

—Lo siento...es que quiero tenerte conmigo todo el tiempo...ya descubriremos una forma..., te extraño Seokjin, al menos quedan sólo tres días para volver a tenerte...