Amor Por Casualidad©

Capítulo 19.

Lentamente abro los ojos, tratando de afrontar los golpes que provienen desde la puerta de mi habitación no tan fuertes pero si lo suficiente para arruinar mi momento de dormir tranquilamente. Perezosa y con los ojos adormilados me levanto de la cama para dirigirme a la puerta.

Abro del pestillo con molestia a la persona detrás, Joshua me mirá con horror antes de pasar rápidamente dentro de mi habitación, empujándome levemente para luego cerrar la puerta detrás de si, abre la boca para hablar y luego la vuelve a cerrar con labios temblorosos.

—¿Qué te pasa? —susurró aún adormilada.

—Tú... —balbucea. —Esta aquí.

Frunzo el ceño confundida y vuelvo a tumbarme sobre la cama.

—¿Mi qué?

—¡Tú madre! —alza la voz.

Mi cara palidece y reí con nerviosismo, mirándolo en busca de que en algún momento me diga qué es una broma.

—Si es una de tus bromas dilo ya, de estas no me gustan...

—¡No la es, está aquí!

—¿Aquí dónde, Joshua? —me levanto de la cama de un salto.

—En la planta baja, esta subiendo.. —se relambe los labios, aúnnervioso. —Es mi culpa.

Vuelvo a fruncir el ceño.

—Es que no me la creo, si ella estuviera aquí hubiera recibido una de sus llamadas y..—caminó por la habitación en busca de mi cartera

—¿Qué buscas? —pregunta siguiendome.

—¿Dónde has dejado mi cartera.?

—En el armario.

Casi corriendo voy en busca de ella, y cuándo la encuentro empiezo a rezar por mis adentros que tuviera una llamada, porqué si no es así viene por algo más qué verme hoy. Agarró mi móvil y lo enciendo rápidamente, busco alguna señal de su nombre en mis historial y no encuentro nada.

Mi corazón está latiendo a mil.

Miró a Joshua que está más nervioso que yo misma.

—¿Por qué estás tan nervioso, si es mi madre?—logré decir.

—Es que bueno yo trate de...—se calla.

—¡Por dios, me pones más nerviosa habla de una vez!

—Trate de detenerlo Fran, pero..

—¿Detener a quién? —enarque una ceja.

—Jacob..

Silencio.

Mi cuerpo tiembla y llevo una mano a la boca tratando de asimilar la información que acabo de tener. Jake, como es posible qué me allá olvidado que él aún seguía aquí, que aún sabiendolo me quedé dormida.

Mierda, es mi culpa.

—Joshua,  ¿que hizo? —lo miré aún paralizada.

—La recepcionista nos llamó. — el retrocede y se sienta sobre la cama.—Estábamos los tres en la sala, fui el único que se levantó a atender la llamada y por la conmoción cuando me hablo tú madre.. yo alce la voz y hable de más. —pausa. —Así qué.. él lo escucho y se ofreció para ir a buscarla, lo quise detener pero no pude ya sabes..

Asentí levemente, aún procesandolo.

Como es que me e dormido tanto, qué ni siquiera lo escuché irse de la habitación.

—¿Entonces solo se ofreció y no dijo nada más?

El asintió y solte un suspiró de alivió.

—Joshua. —empecé a respirar con normalidad.  —Cuándo ella suba, trata de llevarla más contigo, yo hablaré con él para que se retire.