En definitiva, hace días vengo observando, ni más ni menos, que a un rarito.
¿Y por qué?
Simple. Quiero estar con él.
Y saben, el no poder hacerlo es frustrante, convirtiéndose en mi primer problema.
Porque tengo dos.
El segundo es que estar con Ken...
—Si sigues comiendo tanta tarta de manzana, te convertirás en una.
Kenma rió. Lucía muy feliz con el postre.
—Es lo más delicioso del mundo. Me encanta.
Se notaba lo enfermo que estaba: A parte de que sonreía tanto (eso es raro), su nariz estaba enrojecida y sus ojos hinchados. Diría que estaba resfriado.
—Me sorprende verte tan feliz.
Sonaba mejor en mi cabeza.
—Y a mí no me sorprende verte ser tan estúpido.
—¡Oye!
Kenma borró su sonrisa y desvió la mirada. Yo reí y tiré suavemente de su cabello, llamando su atención.
—¿No quieres ir a acostarte un rato? —negó—. Se nota que estás cansado. Ve a dormir, Kenma.
—Deja de pretender que te preocupas por mí...
Se quejó levantándose. Yo lo seguí riendo.
—¡Realmente lo hago!
—No, no lo haces —Se apresuró en dejar su plato en la cocina—. No te importo realmente, idiota...
Es torpe, se nota demasiado. Cuando llegó a la escalera, sus pies se enredaron y cayó: yo fui rápido para tomarlo en mis brazos. Él me miró con el ceño fruncido, ¿y ahora qué hice?
—Suéltame...
—Oh no, claro que no.
Antes de dejar que se aleje, lo cargué como una princesa. Y diré así porque no tengo ni la más mínima idea de cómo se llama esa posición.
—¡Bájame!
—¡A dormir, Kenma!
Lo llevé a su cuarto realmente rápido. Cuando me quise dar cuenta, ya estaba acostado en la cama y me miraba molesto, acomodándose.
—Idiota.
—Hoy has insultado demasiado —toqué su frente y me dió un manotazo—. Ah, tienes fiebre. Tengo que ir a buscar unas cosas.
No sé qué me dijo pero me fui del cuarto. Sinceramente me ponía nervioso ver a Kenma en ese estado.
Cuando regresé, él se había dormido. Inevitablemente reí y lo acomodé, dejando un trapo mojado en su frente. Después me tomé el tiempo de tomarle una foto, claramente en algún futuro lo molestaría.
Y por último, me tiré en su sofá hasta esperar que se despierte quizás con un poco más de humor.
No fue buena idea.
—¡Kenma, llega- ¿Quién eres tú?
¿Hola, suegros?
No, espera. No quiero que sea mi novio.
—Ah... eh, ¡Kuroo Tetsuro! —me levanté rápidamente haciendo la estúpida reverencia—. Soy un amigo de Kenma...kun.
—Oh, no nos había contado sobre ti —sonrió acercándose. Su madre es bonita (con todo el respeto)—. Soy Yumi.
—Y yo Ritsu —Su padre.
—Un placer, yo...
Me quiero ir.
—¿Quieres quedarte un rato más? Traje cosas para hacer galletas.
No, ya no quiero irme.
¡No pude negarme!
Entonces media hora después, yo charlaba con Yumi-san mientras me enseñaba a hacer galletas. Ella me había dado un delantal y un gorro de Chef así estábamos vestidos iguales; fácilmente entré en confianza con ella y con el padre de Kenma me costó un poco más debido a que se tuvo que ir de urgencia a trabajar. Él es médico y ella chef aunque creo que también estudió algo relacionado con la medicina.
Yumi-san me contó cosas sobre Kenma, como por ejemplo que se enfermaba fácilmente y que amaba los gatos, solo que no podían tener uno porque su padre era alérgico. Yo sinceramente prefiero los perros.
—Kenma es muy tranquilo. Me sorprende que haya querido ser mi amigo.
(Lo obligué)
—Nos habló de ti. Dice que lo tienes cansado.
—¡Yumi-san!
Ella soltó una carcajada y comenzó a explicarme cómo empezar a cortar las galletas. Yo la escuchaba para después hacerle caso e intentar que me salga algo decente. Si es así, mínimo le llevaré una a mi padre.
—¿Qué está pasando aquí?
Mientras las galletas se hacían en el horno, Yumi y yo nos habíamos sentado a conversar. Ella había preparado una chocolatada caliente y un café.
—Oh, despertaste —dijo la mujer. Yo le sonreí divertido—. Tetsuro y yo hicimos galletas.
—¿Tetsuro? —alzó una ceja. Se ve tan tierno—. ¿Desde cuándo se conocen?
—Desde que estás dormido. ¿Ya estás mejor?
Pregunté preocupado. Él me dedicó una mala malhumorado y arrastró sus pies al refrigerador.
—Cállate...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.