capitulo 27

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La Jaula de Oro
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Unos cuantos rayos de sol se colaban por la ventana de la habitación, iluminando la cara del joven rubio, quien hasta ahora se encontraba durmiendo.

- eh... pero que cojones paso -

Dijo, levantándose de golpe.

En eso, Fuutarou empieza a sentir una fuerte migraña, que no lo dejaba ver bien su entorno, pero pasando unos 5 minutos, su vista se aclara, a medida que la migraña pasa.

- d...donde estoy -

Dijo confundido, mientras miraba atonito a su alrededor.

El rubio veía que estaba en una habitación, de estilo tradicional, con una salida a un bosque

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El rubio veía que estaba en una habitación, de estilo tradicional, con una salida a un bosque.

- waos -

Dijo sorprendido.

En eso, este se da cuenta que esta en una especie de cama que es la fusión de un futon tradicional, y una cama occidental, cosa que le sorprendió mucho, ya que esas camas suelen costar miles de yenes.

- acaso, estoy soñando -

Se preguntó así mismo, sin dejar de apreciar la habitación en la que se encontraba.

Fue entonces, cuando finalmente el peliamarillo, se levanta de la cama con la intención de explorar su entorno, pero a poco centímetros de alcanzar la puerta, un ruido metálico se escucha, y una fuerza lo detiene de seguir.

- pero que mierda -

Dijo confundido, volteando a ver la fuente de aquel ruido.

Fuutarou se sorprendió, al ver que su pie estaba encadenado a la cama, pero lo que le sorprendió aun más, fue ver que la cadena que lo aprisionaba era de oro, y tenía grabados decorativos.

- de seguro cuesta más que mi vida entera -

Dijo sorprendido.

- hay 5 personitas que piensan todo lo contrario -

Dijo una voz femenina, con un tono maternal.

En ese momento, Fuutarou se exalta, y voltea a ver rápidamente a la dueña de esa voz.

- Di....directora -

Dijo anonadado, mirando a la pelicarmesí, quien acababa de entrar a la habitación.

- no Fuutarou, de ahora en adelante me puedes llamar Rena -

Dijo en un tono tranquilo, para luego dedicarle una sonrisa maternal al peliamarillo.

En ese instante, el peliamarillo mira extrañado a la pelicarmesí, quien además de vestir un yukata negro, traía una bandeja con todos los utensilios necesarios para hacer una taza de té, junto a un pequeño plato con varías galletas.

Enfermas De Amor (Go Toubun No Hanayome)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora