INSTITUTO SAN LORENZO
El segundo trimestre le trajo una sorpresa enorme a Ruslana, no fue su reconciliación con Noelia, por supuesto. La profesora de matemáticas había decidido que Ruslana y Emma debían sentarse juntas para que Ruslana pudiese aprender algo de su alumna estrella. Y así llevaban desde hace unas cuantas semanas, quedaba muy poco para terminar con el segundo trimestre y casi siempre hablaban para insultarse mutuamente, pero de alguna manera, habían logrado congeniar, Ruslana ya no sentía tanto odio por Emma y por supuesto Emma, se estaba dejando llevar. Sus miradas no las ocultaba tanto como antes y ya no se preocupaba mucho por el que dirán.
Ruslana no había parado de oír a la gente del instituto hablar sobre la gran fiesta que había el fin de semana y seria nada más y nada menos que de Noelia, si, su pelinegra. Aunque ya no hablaran para nada, Ruslana aún la seguía observando desde lejos.
La castaña observo como al vaciarse el pasillo, la única presente que estaba abriendo su taquilla era la rubia, así que se acercó a ella para quitarse la duda que tenia.
—Pija, ¿donde es la fiesta de Noelia este fin de?— preguntó esperando que Emma solo respondiera y ella pudiera irse sin más. Que equivocada estaba.
Emma no podía perder esta oportunidad, así que decidió jugar sus cartas— ¿Tanto te interesa?— preguntó, la castaña no hizo ningún ademán así que— si quieres saberlo, tienes que venir conmigo a comprar ropa para la fiesta.
La castaña lo pensó y luego sin otra salida, respondio— Vale, pero no te creas que esto me hace tu amiga. Solo dime la dirección.
—Trato hecho, luego te paso la dirección y no te preocupes por lo de la tienda, será...entretenido.— Dijo mirando con diversión a la castaña.
Justo cuando Ruslana iba a contestar, aparece en el pasillo una no muy segura de ver lo que estaba viendo, Maria. A paso decidido se acercó a ambas chicas— ¿No tienes mejor cosa que hacer que estar aquí?— preguntó con molestia Maria.
—¿Y a ti que más te da?— respondió la castaña mirando desafiante a la castaña clara.
—Mira, que chulita. Creía que te habías rendido ya. Pero nada, a seguir con el papel de macarra no?— se burló Maria.
—Ya esta, me está preguntando por la tarea de antes Maria, que no se entera la macarra— respondió Emma tratando de no sonar como si estuviera defendiendo a la castaña.
—Tan chulita y tan idiota— suspiro Maria como si eso le pesase a ella.
—¿Porque mejor no te vas a tomar por culo?, tus jueguitos ya aburren Maria, das vergüenza ajena de tanta gilipolles que dices.— Respondió la ojimarron aburrida del teatrito de Maria, hasta parecía celosa de que ruslana estuviera cerca de Emma.
—¿Te piensas que me importa lo que digas?, de verdad que no te enteras Ruslana. Bueno, me voy que lo imbecil se pega, ¿vienes Emma?
—Ahora, tengo que guardar esto— Maria asintió y siguió su camino hacia la salida del instituto.
—La has puesto de los nervios de verdad— Dijo la rubia a la castaña antes de cerrar su taquilla, ruslana sonrió de lado al escuchar eso, molestar a Maria era uno de sus hobbies favoritos.— y gracias por no montar un númerito con Maria, te debo una— Dijo la ojiazul que se dio cuenta que desde lo lejos estaba Noelia también en ese pasillo observandolas. Se acercó a Ruslana y le plantó un beso en la mejilla, provocando a la pelinegra.
—No te hagas ilusiones pija, esto no cambia nada. La próxima vez que intentes jugar conmigo, asegúrate de que no te juegues el culo.— Respondió la castaña sin darse cuenta de la presencia de la pelinegra.
Emma le sonríe, satisfecha con la reacción que ha causado en su amiga que seguía vigilando desde lejos. Se dio media vuelta y se alejo de la castaña con aires de superioridad. Mientras que la castaña estaba confundida por todo lo que acaba de ocurrir. Cada vez estaba más y más convencida de que Emma estaba loca.
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BATALLA DE CORAZONES| RUSLANA OT2023
FanfictionLa historia de Emma y Ruslana es un viaje a través del caos adolescente, donde las emociones están a flor de piel y cada acción tiene consecuencias. Mientras el curso avanza, las dos chicas descubrirán que detrás de las máscaras que se ponen para so...